La estimulación táctil en bebés es fundamental en su desarrollo motor y psicoemocional, conozca cómo funciona y algunos juegos táctiles para su bebé.
¿Qué es la estimulación táctil?
La estimulación táctil en los bebés es una de las formas más importantes de estimulación temprana para nuestros niños. Mientras que el resto de sus sentidos siguen desarrollándose durante varios meses para llegar a su plenitud, el del tacto ya lo está desde un principio. Por tanto, las primeras percepciones del bebé a nivel del tacto son muy intensas e importantes.
La estimulación temprana táctil pretende tonificar y expandir este sentido, que, a su vez, estimula a las neuronas y a las conexiones entre ellas para un buen desarrollo motor y psicoemocional del niño.
¿En qué consiste la estimulación táctil?
La estimulación táctil consiste en una serie de actividades, a modo de juegos con el bebé, para que éste pueda percibir diferentes tipos de sensaciones al tacto. Por supuesto, la estimulación táctil no debe ser desagradable para él.
Para ello se realizan masajes y caricias al bebé, se le permite que toque diferentes texturas (telas, plásticos duros y blandos, diferentes formas, peluches, etc.) Siempre como si fuera un juego y con los padres controlando que no se meta cosas en la boca que pueda tragar.
Beneficios de la estimulación táctil
La estimulación temprana táctil, aparte de beneficiar al desarrollo intelectual del bebé, ayuda a que vaya reconociendo su mundo. Por ejemplo, la diferencia entre duro y blando le servirá cuando empiece a gatear y caminar y reconocer que superficies son más seguras o no.
Por otro lado, es muy importante la estimulación táctil a través del contacto con la piel de sus progenitores, sea por medio de masajes, caricias o juegos. La ciencia y el estudio del contacto humano demuestran su eficacia terapéutica en un estudio realizado por Moore ER, Anderson GC, Bergman N para la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De tal forma que, incluso los niños prematuros que tenían una estimulación temprana con el contacto directo de su madre, evolucionaban más rápidamente a todos los niveles que los niños que no tenían este contacto a menudo.
Ejercicios de estimulación táctil
Según el tiempo del bebé, se pueden hacer diferentes actividades de estimulación táctil. Aquí les ofrecemos algunas ideas:
Entre 0-6 meses: Para introducirlo en los hábitos de cuidados del bebé, con cada cambio de pañal acaricie suavemente con las yemas las extremidades y el tronco del bebé, indicándole el nombre correspondiente: brazo, mano... y, así, además de un estímulo táctil también será auditivo. Dar toquecitos muy suaves, como tamborileando con la punta de los dedos, en diferentes partes del cuerpo del niño. Durante el baño moverle los bracitos en rotación a la vez y luego de forma independiente, dejar que juegue y explore el agua y se prepare para ser remojado.
Entre 7-12 meses: La estimulación táctil en este periodo ya no es pasiva, pasa a una etapa de exploración por parte del niño. Dejar que examine con sus manos todo tipo de texturas: arena, granos de arroz, plásticos duros, telas diferentes, lana, seda, agua, peluches, cartón, papel, etc. (nada que sea peligroso, por supuesto). En esta fase los niños tienden a sondear las cosas con la boca, por lo que no hay que dejarlos solos con según qué materiales. También se le puden pasar por el cuerpo las telas o pelotas de goma, con diferentes tamaños, masajeándole en redondo.
Nuestros consejos
Una vez ha entendido cómo funciona la estimulación táctil, usted puede usar su imaginación para jugar con su bebé y estimular sus capacidades sin necesidad de grandes gastos en aparatos o juguetes. Siempre que pueda combine dos formas diferentes de estimulación temprana a la vez: acariciar (táctil), cantar o hablar (auditiva), etc. En nuestra sección de "estimulación temprana" encontrará más consejos y ejercicios para estimuar a su bebé sin grandes gastos.
Le recomendamos que si tiene posibilidades haga algún curso de masaje infantil. Además de ser un estímulo táctil muy bueno y agradable para el bebé, ayuda a estrechar los vínculos, especialmente con el padre, con el que suele tener menos contacto físico. Por último, nunca sobreestimule al bebé. Los ejercicios de estimulación temprana deben ser un juego para él, de no ser así conseguiremos el efecto contrario.
Juan José Sánchez Ortiz
Terapeuta, escritor e investigador
Colaborador de enbuenasmanos.com
jueves, 30 de septiembre de 2010
Terapia con perros: ventajas y experiencias
La terapia con perros está muy bien documentada con miles de experiencias y casos clínicos exitosos con ancianos o gente con bloqueos emocionales.
Experiencias de terapia con perros
Brickel, en 1979. Destaco como principal beneficio la sensibilidad del paciente. Los perros eran el principal tema de conversación entre ellos y entre pacientes-personal. Otros beneficios de la terapia con perros eran el placer físico de acariciar a los perros.
Estudio JACOPIS, en 1981. Los resultados obtenidos por ellos indicaron una mayor alegría entre pacientes, se estimulaba la risa, la felicidad, el sentido del humor. Se mejoraba la relación entre pacientes y paciente-personal.
Terapia con perros en una residencia geriátrica de Ohio: El estudio fue dirigido por Robert Andrysco, en la residencia geriátrica de Westminster Thurber. De los 23 residentes que participaron, 15 mejoraron significativamente en las áreas de actividad, comunicación verbal, conversaciones con animales, socialización con el personal y con los otros residentes.
También se menciono el caso de una anciana que engañaba y abusaba del personal, verbal y físicamente, ya que estaba convencida de que intentaban herirla. Al empezar a acariciar el perro, en 6-8 meses, se integró hasta tal punto que ayudaba a los nuevos residentes. Según Andrysco "ella se fiaba del perro, después transfirió su confianza a mí, y finalmente al personal de la residencia. Fue nuestro milagro".
En una encuesta realizada en los EEUU, se observó que las personas mayores de 65 años que poseían un perro sufrían depresión con menor frecuencia que los que no lo tenían. Se concluyó que el perro podría actuar como soporte de las emociones, pasando a ser un ser en quién se puede confía y a quién se le habla, dándosele así al anciano un apoyo ante el aislamiento y la soledad.
Otro estudio, sobre terapias con perros, realizado en América del Norte concluyó que las personas que tienen perros o contacto frecuente con ellos, realizan menos visitas al médico. Esta realidad parece ser debida a la disminución del stress, debido a los beneficios que el animal le da a su dueño, no sólo con pasearlo, darle de comer... sino que le crea una serie de rutinas diarias.
Cusack en un estudio con ancianos observa de nuevo que los animales de compañía mejoran psicológicamente a esos ancianos, además de su sentido del humor, debido al entretenimiento que le produce.
Beneficios de la terapia con perros
Según diversos estudios de investigación, y comprobados por nosotros mismos en los previos a la terapia con perros, se ha demostrado que uno de los problema que más sufren los ancianos, es la soledad. Por eso uno de los objetivos propuestos, es dar cariño a través de los perros a los ancianos, para así disminuir el sentimiento de soledad y aislamiento.
La terapia con perros, también aporta unos beneficios físicos. El simple hecho de acariciar al perro, provoca un relajamiento, lo cual se traduce en una disminución de la presión arterial.
Además de los movimientos del brazo, la mano y otras partes del cuerpo, que se ven obligados a realizar para acariciar a los perros, durante las sesiones de terapia con perros. Estas acciones obligan a realizar unos movimientos, a estirarse, a volverse...
Así hemos visto como tras las sesiones de terapia con perros, despertamos una diversión en los ancianos. A nuestra salida rara vez se acuerdan del dolor que les acuciaba, de la rutina que les aburría. Sino que nos vamos dejando una conversación sobre perros, conociendo a nuevos residentes o recordando la memoria de sus mejores momentos con otros perros.
Así vemos como el perro es canalizador de conversaciones no sólo entre residentes, sino también entre residentes y cuidadores. Ancianos introvertidos, que no se relacionan con los demás ni se integran, parecen cambiar tras la llegada de la terapia con perros, se inician en conversaciones con los perros, guardarles comida, y acaban preguntando cuando vuelven los perros, que comen, como se les enseña a los perros para terapia.
Favorecemos el intercambio afectivo, aquí dan y reciben cariño. Y a esas edades suele faltar el recibir, lo cual acelera los procesos seniles.
El anciano adquiere nuevas responsabilidades, lo que le hace volverse más activo, se preocupa más por si mismo, dejando así el abandono en el que se sumen, tras la soledad. Su vida toma ritmo con la terapia con perros, espera el día de llegada, están pendientes del perro.
Y todo eso para que con la llegada del perro, una sola caricia, una sola mirada del perro, nos lleva a ver como siguen sintiendo, quieren, conocen, viven...
Sergio A. Otal Escartin
Veterinario y Psicólogo canino
Experiencias de terapia con perros
Brickel, en 1979. Destaco como principal beneficio la sensibilidad del paciente. Los perros eran el principal tema de conversación entre ellos y entre pacientes-personal. Otros beneficios de la terapia con perros eran el placer físico de acariciar a los perros.
Estudio JACOPIS, en 1981. Los resultados obtenidos por ellos indicaron una mayor alegría entre pacientes, se estimulaba la risa, la felicidad, el sentido del humor. Se mejoraba la relación entre pacientes y paciente-personal.
Terapia con perros en una residencia geriátrica de Ohio: El estudio fue dirigido por Robert Andrysco, en la residencia geriátrica de Westminster Thurber. De los 23 residentes que participaron, 15 mejoraron significativamente en las áreas de actividad, comunicación verbal, conversaciones con animales, socialización con el personal y con los otros residentes.
También se menciono el caso de una anciana que engañaba y abusaba del personal, verbal y físicamente, ya que estaba convencida de que intentaban herirla. Al empezar a acariciar el perro, en 6-8 meses, se integró hasta tal punto que ayudaba a los nuevos residentes. Según Andrysco "ella se fiaba del perro, después transfirió su confianza a mí, y finalmente al personal de la residencia. Fue nuestro milagro".
En una encuesta realizada en los EEUU, se observó que las personas mayores de 65 años que poseían un perro sufrían depresión con menor frecuencia que los que no lo tenían. Se concluyó que el perro podría actuar como soporte de las emociones, pasando a ser un ser en quién se puede confía y a quién se le habla, dándosele así al anciano un apoyo ante el aislamiento y la soledad.
Otro estudio, sobre terapias con perros, realizado en América del Norte concluyó que las personas que tienen perros o contacto frecuente con ellos, realizan menos visitas al médico. Esta realidad parece ser debida a la disminución del stress, debido a los beneficios que el animal le da a su dueño, no sólo con pasearlo, darle de comer... sino que le crea una serie de rutinas diarias.
Cusack en un estudio con ancianos observa de nuevo que los animales de compañía mejoran psicológicamente a esos ancianos, además de su sentido del humor, debido al entretenimiento que le produce.
Beneficios de la terapia con perros
Según diversos estudios de investigación, y comprobados por nosotros mismos en los previos a la terapia con perros, se ha demostrado que uno de los problema que más sufren los ancianos, es la soledad. Por eso uno de los objetivos propuestos, es dar cariño a través de los perros a los ancianos, para así disminuir el sentimiento de soledad y aislamiento.
La terapia con perros, también aporta unos beneficios físicos. El simple hecho de acariciar al perro, provoca un relajamiento, lo cual se traduce en una disminución de la presión arterial.
Además de los movimientos del brazo, la mano y otras partes del cuerpo, que se ven obligados a realizar para acariciar a los perros, durante las sesiones de terapia con perros. Estas acciones obligan a realizar unos movimientos, a estirarse, a volverse...
Así hemos visto como tras las sesiones de terapia con perros, despertamos una diversión en los ancianos. A nuestra salida rara vez se acuerdan del dolor que les acuciaba, de la rutina que les aburría. Sino que nos vamos dejando una conversación sobre perros, conociendo a nuevos residentes o recordando la memoria de sus mejores momentos con otros perros.
Así vemos como el perro es canalizador de conversaciones no sólo entre residentes, sino también entre residentes y cuidadores. Ancianos introvertidos, que no se relacionan con los demás ni se integran, parecen cambiar tras la llegada de la terapia con perros, se inician en conversaciones con los perros, guardarles comida, y acaban preguntando cuando vuelven los perros, que comen, como se les enseña a los perros para terapia.
Favorecemos el intercambio afectivo, aquí dan y reciben cariño. Y a esas edades suele faltar el recibir, lo cual acelera los procesos seniles.
El anciano adquiere nuevas responsabilidades, lo que le hace volverse más activo, se preocupa más por si mismo, dejando así el abandono en el que se sumen, tras la soledad. Su vida toma ritmo con la terapia con perros, espera el día de llegada, están pendientes del perro.
Y todo eso para que con la llegada del perro, una sola caricia, una sola mirada del perro, nos lleva a ver como siguen sintiendo, quieren, conocen, viven...
Sergio A. Otal Escartin
Veterinario y Psicólogo canino
miércoles, 29 de septiembre de 2010
Técnicas terapéuticas que pueden emplear los padres de familia
Los niños, al igual que los adultos, presentan diferentes conflictos que les genera tristeza, angustia y preocupación. Para ellos es tan angustiante salir mal en un examen, como saber que su mejor amiga ya no les habla, o que no tienen con quién jugar en la escuela, o que se burlan de ellos por los anteojos que usan. Sin embargo, muchas veces para los adultos es difícil hallar la forma de lograr saber qué le sucede al niño, qué piensa o qué siente respecto a alguna situación específica.
En Psicología Infantil se cuenta con numerosas técnicas terapéuticas que permiten acceder a ese mundo interno del niño. Algunas de ellas pueden ser aplicadas por los padres o educadores pues lo que pretenden es ayudar a los niños a identificar y expresar sus sentimientos y tener modelos a seguir para resolver dichos problemas. A continuación, cuatro técnicas terapéuticas que usted puede emplear con sus hijos:
1. Bibioterapia: Consiste en hacer uso de los libros de cuentos para ayudar a los niños a resolver un conflicto. Actualmente en el mercado se cuentan con diversos libros de cuentos cuyos temas giran en torno a situaciones y circunstancias propias de los niños de hoy, desde situaciones como orinarse en la cama, la llegada de un hermanito y los celos respectivos, el miedo a la oscuridad; hasta situaciones de divorcio, pleitos entre los padres e incluso temas de abuso sexual. El objetivo al usar la biblioterapia no es simplemente llegar y leer el cuento sino que se deben considerar algunos pasos:
a. Decidir si se lee o se cuenta el cuento: Algunos cuentos se pueden leer tal cual vienen, otros se pueden adaptar utilizando como guía las ilustraciones. Para ello se debe tomar en cuenta la edad del niño ya que su período de atención corresponde a un minuto por año.
b. Reflejar los sentimientos de los personajes: Aquí se enfatiza cómo se sintió el personaje principal del cuento con el que queremos que el niño se identifique. Lo ayudamos a nombrar dicho sentimiento pues es común que los niños digan que el personaje se sintió “bien” o “mal” en lugar de decir que se siente triste, enojado, frustrado, celoso, avergonzado. Además el niño debe identificar que él se siente de igual manera que el personaje ya que a ambos les sucede lo mismo o algo muy similar.
c. Hacer preguntas de reflexión: Conforme se va leyendo el cuento se le va preguntando al niño qué cree él que puede hacer el personaje del cuento para resolver el problema. Esto ayuda a identificar cuáles son los recursos para afrontar los problemas con los que cuenta el niño, ya sea que los tiene y no los pone en práctica o que ni siquiera los tiene.
d. Modelar comportamientos alternativos: Se muestra al niño cuál fue la forma en que el personaje resolvió el problema para que él haga lo mismo: habló con sus papás, reconoció que había cometido un error, se disculpó y trató de solucionarlo; pidió ayuda, etc.
e. Hacer una síntesis: Se hace un resumen del cuento relacionándolo con la situación vivida por el niño, se recalcan los sentimientos y la forma en que se puede resolver el problema y se le pregunta abiertamente al niño cómo puede aplicar lo sucedido en el cuento en su propia situación.
2. Terapia de juego: Esta es otra herramienta sumamente útil para los padres usando el canal de comunicación que los niños más disfrutan: los juguetes. Hay que empezar por definir que el juego es el trabajo de los niños, es el medio por el cual ellos aprenden del mundo y sus relaciones, crecen y experimentan. Por tanto, el sentarse a jugar con ellos no solo ayuda a fortalecer vínculos entre padres e hijos sino que provee al niño de importantes herramientas de resolución de conflictos. Algunos de los juguetes que mejor se pueden emplear en la terapia de juego utilizada por los padres son los títeres, muñecos de peluche o muñecos incluso de súper héroes que tengan los niños. El objetivo es representar una situación que el niño esté viviendo para observar cómo la resuelve el niño. Se puede utilizar un títere que use mamá y que le cuente al títere que usa el niño su problema, pidiéndole al niño consejo (obviamente el problema del títere es el mismo problema del niño). Si el niño no sabe qué aconsejarle mamá puede usar un segundo títere que venga con la respuesta y le modele la solución. Lo que se pretende lograr aquí es al igual que en la Biblioterapia, la expresión de los sentimientos por parte del niño y enseñarle formas de enfrentar un problema. En el mercado existen incluso títeres de la familia o se pueden conseguir también familias en miniaturas que también serán un excelente recurso.
3. Arte terapia: Se habla aquí del uso de materiales de arte (lápices de color, témperas, crayolas, etc.) para la expresión de los sentimientos. Existe una técnica llamada Ilumina tu Vida, en la que el niño le da el nombre de un sentimiento a un color diferente. Luego se le pide que haga un dibujo tomando en cuenta que el color que utilice representará el sentimiento asignado. Se sorprenderá al ver lo que los niños expresan a través de estos dibujos. También se le puede pedir que haga un dibujo cualquiera e invente una historia del mismo. Deje que el niño lo haga como quiera, sin estar pendiente de si se sale o si pintó feo. Analice lo expresado por el niño a través de su obra de arte.
4. Juegos con palabras: Los juegos con palabras ayudan a la verbalización de los sentimientos. Existe un juego llamado el “Juego de sentirse bien- sentirse mal”. Consiste en que padre o madre e hijo toman una hora por semana para hablar de algo que haya ocurrido en esos días que los haya hecho sentir “bien” y “mal”. El niño comienza diciendo algo que lo hizo sentir “mal”, por ejemplo, “Me sentí mal el martes cuando me regañaste por no haber limpiado los zapatos.” El que escucha, en este caso el padre, refleja el sentimiento expresado por el niño “Entiendo que te sintieras triste porque te regañara el martes.” Se enfatiza ÚNICAMENTE el sentimiento, no se entra en discusión del porqué del regaño, lo importante en el juego es lo que se siente. Cuando le toca el turno al papá, éste puede decir “Me sentí mal el lunes cuando me respondiste feo al llamarte a comer.” Igual el niño debe reflejar el sentimiento expresado por el padre: “Entiendo que te hayas enojado.” Luego ambos buscan cómo resolver en una próxima vez las dos situaciones que en esta semana los hicieron sentir “mal”. Se hace lo mismo con las situaciones que los hicieron sentir bien y luego terminan jugando algo escogido por ambos, una partida de damas chinas, una lotería, stop, etc durante unos quince minutos aproximadamente. El objetivo de este juego es expresar los sentimientos sin temor a ser juzgados o rechazados, que el niño se dé cuenta como sus padres también se ven afectados en sus sentimientos y mejorar la relación entre ambos.Es útil entre padres e hijos con dificultades en la relación o con niños recién adoptados. Le animo a hacer uso de estas técnicas y disfrutarlas con sus hijos.
En Psicología Infantil se cuenta con numerosas técnicas terapéuticas que permiten acceder a ese mundo interno del niño. Algunas de ellas pueden ser aplicadas por los padres o educadores pues lo que pretenden es ayudar a los niños a identificar y expresar sus sentimientos y tener modelos a seguir para resolver dichos problemas. A continuación, cuatro técnicas terapéuticas que usted puede emplear con sus hijos:
1. Bibioterapia: Consiste en hacer uso de los libros de cuentos para ayudar a los niños a resolver un conflicto. Actualmente en el mercado se cuentan con diversos libros de cuentos cuyos temas giran en torno a situaciones y circunstancias propias de los niños de hoy, desde situaciones como orinarse en la cama, la llegada de un hermanito y los celos respectivos, el miedo a la oscuridad; hasta situaciones de divorcio, pleitos entre los padres e incluso temas de abuso sexual. El objetivo al usar la biblioterapia no es simplemente llegar y leer el cuento sino que se deben considerar algunos pasos:
a. Decidir si se lee o se cuenta el cuento: Algunos cuentos se pueden leer tal cual vienen, otros se pueden adaptar utilizando como guía las ilustraciones. Para ello se debe tomar en cuenta la edad del niño ya que su período de atención corresponde a un minuto por año.
b. Reflejar los sentimientos de los personajes: Aquí se enfatiza cómo se sintió el personaje principal del cuento con el que queremos que el niño se identifique. Lo ayudamos a nombrar dicho sentimiento pues es común que los niños digan que el personaje se sintió “bien” o “mal” en lugar de decir que se siente triste, enojado, frustrado, celoso, avergonzado. Además el niño debe identificar que él se siente de igual manera que el personaje ya que a ambos les sucede lo mismo o algo muy similar.
c. Hacer preguntas de reflexión: Conforme se va leyendo el cuento se le va preguntando al niño qué cree él que puede hacer el personaje del cuento para resolver el problema. Esto ayuda a identificar cuáles son los recursos para afrontar los problemas con los que cuenta el niño, ya sea que los tiene y no los pone en práctica o que ni siquiera los tiene.
d. Modelar comportamientos alternativos: Se muestra al niño cuál fue la forma en que el personaje resolvió el problema para que él haga lo mismo: habló con sus papás, reconoció que había cometido un error, se disculpó y trató de solucionarlo; pidió ayuda, etc.
e. Hacer una síntesis: Se hace un resumen del cuento relacionándolo con la situación vivida por el niño, se recalcan los sentimientos y la forma en que se puede resolver el problema y se le pregunta abiertamente al niño cómo puede aplicar lo sucedido en el cuento en su propia situación.
2. Terapia de juego: Esta es otra herramienta sumamente útil para los padres usando el canal de comunicación que los niños más disfrutan: los juguetes. Hay que empezar por definir que el juego es el trabajo de los niños, es el medio por el cual ellos aprenden del mundo y sus relaciones, crecen y experimentan. Por tanto, el sentarse a jugar con ellos no solo ayuda a fortalecer vínculos entre padres e hijos sino que provee al niño de importantes herramientas de resolución de conflictos. Algunos de los juguetes que mejor se pueden emplear en la terapia de juego utilizada por los padres son los títeres, muñecos de peluche o muñecos incluso de súper héroes que tengan los niños. El objetivo es representar una situación que el niño esté viviendo para observar cómo la resuelve el niño. Se puede utilizar un títere que use mamá y que le cuente al títere que usa el niño su problema, pidiéndole al niño consejo (obviamente el problema del títere es el mismo problema del niño). Si el niño no sabe qué aconsejarle mamá puede usar un segundo títere que venga con la respuesta y le modele la solución. Lo que se pretende lograr aquí es al igual que en la Biblioterapia, la expresión de los sentimientos por parte del niño y enseñarle formas de enfrentar un problema. En el mercado existen incluso títeres de la familia o se pueden conseguir también familias en miniaturas que también serán un excelente recurso.
3. Arte terapia: Se habla aquí del uso de materiales de arte (lápices de color, témperas, crayolas, etc.) para la expresión de los sentimientos. Existe una técnica llamada Ilumina tu Vida, en la que el niño le da el nombre de un sentimiento a un color diferente. Luego se le pide que haga un dibujo tomando en cuenta que el color que utilice representará el sentimiento asignado. Se sorprenderá al ver lo que los niños expresan a través de estos dibujos. También se le puede pedir que haga un dibujo cualquiera e invente una historia del mismo. Deje que el niño lo haga como quiera, sin estar pendiente de si se sale o si pintó feo. Analice lo expresado por el niño a través de su obra de arte.
4. Juegos con palabras: Los juegos con palabras ayudan a la verbalización de los sentimientos. Existe un juego llamado el “Juego de sentirse bien- sentirse mal”. Consiste en que padre o madre e hijo toman una hora por semana para hablar de algo que haya ocurrido en esos días que los haya hecho sentir “bien” y “mal”. El niño comienza diciendo algo que lo hizo sentir “mal”, por ejemplo, “Me sentí mal el martes cuando me regañaste por no haber limpiado los zapatos.” El que escucha, en este caso el padre, refleja el sentimiento expresado por el niño “Entiendo que te sintieras triste porque te regañara el martes.” Se enfatiza ÚNICAMENTE el sentimiento, no se entra en discusión del porqué del regaño, lo importante en el juego es lo que se siente. Cuando le toca el turno al papá, éste puede decir “Me sentí mal el lunes cuando me respondiste feo al llamarte a comer.” Igual el niño debe reflejar el sentimiento expresado por el padre: “Entiendo que te hayas enojado.” Luego ambos buscan cómo resolver en una próxima vez las dos situaciones que en esta semana los hicieron sentir “mal”. Se hace lo mismo con las situaciones que los hicieron sentir bien y luego terminan jugando algo escogido por ambos, una partida de damas chinas, una lotería, stop, etc durante unos quince minutos aproximadamente. El objetivo de este juego es expresar los sentimientos sin temor a ser juzgados o rechazados, que el niño se dé cuenta como sus padres también se ven afectados en sus sentimientos y mejorar la relación entre ambos.Es útil entre padres e hijos con dificultades en la relación o con niños recién adoptados. Le animo a hacer uso de estas técnicas y disfrutarlas con sus hijos.
La terapia va dirigida a encontrar la causa y a utilizar técnicas para que el niño aprenda a controlar los esfínteres
Los trastornos de eliminación de orina y heces, enuresis y encopresis respectivamente, son característicos de la infancia. Pueden tener una causa orgánica o psicológica y, en ambos casos, tienen tratamiento. La terapia psicológica comprende la enseñanza para aprender a controlar los esfínteres, psicoterapia y una serie de recomendaciones para los padres del niño afectado sobre cómo afrontar la situación y resolverla
Escapes involuntarios
La enuresis es el escape involuntario de la orina durante la noche; la incapacidad de retenerla durante el día se denomina incontinencia diurna. Consiste en la aparición de una emisión repetida de la orina en la cama o en la ropa, superados los cuatro años de edad, tiempo en el que el niño debería haber adquirido la continencia urinaria. Para que se pueda hablar de enuresis también hay que hablar de frecuencia: este tipo de incontinencia tiene que ser de dos episodios semanales al menos durante tres meses consecutivos, precisa Silvia Chicote, psicóloga especializada en niños del centro Psicomaster, de Madrid.
Hay dos tipos de enuresis: la primaria y la secundaria. La principal diferencia entre ambas es que, en la enuresis primaria, el niño nunca han llegado a conseguir el control de la orina, mientras que en el caso de la secundaria sí que lo han conseguido, aunque durante un periodo corto de tiempo, unos pocos meses a lo sumo.
La encopresis, por su parte, es la evacuación repetida de heces en cualquier lugar inadecuado que no sea el retrete, como en el suelo o la ropa. Y al menos tiene que producirse una vez a la semana durante tres meses consecutivos. La edad a partir de la cual puede considerarse encopresis son los cuatro años, añade Chicote.
En el 70% de los casos la enuresis no está diagnosticada
Niños afectados
Por lo general, la enuresis es el transtorno o la eliminación más común y, por ello, más estudiado. Este trastorno ocurre por igual en menores de ambos sexos, en cambio, la encopresis es más frecuente en niños. La enuresis nocturna afecta al 15% de los niños de cinco años, según El Libro Blanco "La Enuresis Monosintomática Primaria en España", una iniciativa de la Asociación Española contra la Enuresis, de varias sociedades científicas y de la compañía Ferring que se hizo pública en 2007.
Del documento se extrae que el porcentaje de afectados va disminuyendo con la edad. En el 70% de los casos no está diagnosticada y, según un 83% de los casi 1.200 pediatras a los que se consultó para elaborar el libro, los progenitores no acuden a la consulta por sentir vergüenza de que sus hijos sigan teniendo pérdidas de orina.
A los cuatro años se les escapan las heces al 3% de los niños una vez por semana y, a los siete años, la encopresis tiene una prevalencia del 2,3% en los niños y del 0,7% en las niñas, según datos de un documento sobre los "Trastornos de la eliminación: enuresis y encopresis", de Reyes Hernández Guillén, pediatra del Centro de Salud El Restón, y de Mercedes Rodrigo Alfageme, del servicio de Psiquiatría Infantil, del Hospital Materno-Infantil del 12 de Octubre, ambos de Madrid.
Además, se sabe que un tercio de los niños con encopresis sufre también enuresis nocturna, un 20% enuresis diurna y que un 10% de las niñas padecen infecciones urinarias recurrentes, según el mismo trabajo de Hernández y Rodrigo.
Cuando un niño mayor de cuatro años se orina durante la noche es importante acudir al pediatra para descartar alguna causa orgánica
El trastorno enurético puede tener causas orgánicas por afecciones urológicas, irritaciones o algún proceso infeccioso como una cistitis, pero también puede ser debido a que la capacidad funcional de la vejiga esté disminuida, lo que implica que los niños enuréticos necesiten ir más con más frecuencia al baño. Otras veces puede tener su origen en trastornos neuromusculares que afectan al sistema genitourinario, en la médula espinal o en los centros del cerebro.
Cuando un niño de más de cuatro años orina durante la noche y fuera del retrete, es importante acudir al pediatra para que descarte cualquiera de las causas orgánicas anteriores. Una vez descartadas, si se determina que la enuresis tiene un origen psicológico, se hace necesario acudir a un psicólogo, advierte Chicote. Según información de esta especialista, las causas psicológicas que están detrás de la enuresis también pueden ser múltiples: falta de aprendizaje del niño porque no se le ha enseñado correctamente; insensibilización de la piel a la humedad, favorecida o provocada por usar pañales hasta edades avanzadas, lo que priva al menor del mecanismo de emergencia que le lleva a despertarse cuando se siente húmedo.
También puede haber un interés del niño por conseguir una reacción de sus padres, porque obtiene algo, que habitualmente es su atención. O problemas emocionales, como cambio de colegio, de casa, la separación de los padres o el nacimiento de un hermano pequeño; en definitiva, cualquier factor que altere el entorno del niño.
De la misma manera, detrás de las causas de la encopresis puede estar el estreñimiento: los niños retienen tanto las heces que la presión del colon vence al esfínter y se producen evacuaciones involuntarias
Tratamiento conductual
"Utilizamos ténicas conductuales porque son los procedimientos más seguros, no tienen efectos secundarios y consiguen más curaciones a corto y a largo plazo", informa Silvia Chicote, psicóloga especializada en niños, acerca del abordaje terapéutico. El tratamiento de la enuresis se dirige a corregir los defectos de aprendizaje que existen detrás, a encontrar su causa y a utilizar técnicas conductuales para que el niño aprenda a controlar la micción. Y la duración del tratamiento varía notablemente de un niño a otro. Depende del origen del trastorno y de si éste está asociado a problemas emocionales. En promedio, duran unas diez sesiones.
Entre otros aspectos, se trabaja para que los niños afectados aumenten la capacidad funcional de su vejiga a través de una serie de ejercicios: mediante un entrenamiento se les enseña a aguantar las contracciones del detrusor (músculo que envuelve la vejiga), a retener la orina y a aumentar la capacidad de la vejiga. También se les prescriben ejercicios para que fortifiquen sus esfínteres, cortando el flujo de la orina, mientras están miccionando.
Para que fortifiquen el esfínter también se les puede proveer de unos aparatos antienuréticos o de alarma (el Pipí-stop), provistos de un sensor de humedad y un timbre que se activa ante las primeras gotas de orina que se escapan. Al encenderse esta alarma, el pequeño tiene que despertarse, cerrar el esfínter y levantarse para ir al baño y terminar de orinar. Este sistema se debe mantener hasta que el niño afectado haya pasado dos semanas seguidas sin pérdidas de orina nocturnas; después se le puede retirar gradualmente.
No hay que castigar al niño afectado ni tampoco ponerle pañales durante mucho tiempo
Sin embargo, todo este entrenamiento se debe acompañar de un refuerzo por parte de los progenitores para que el niño descubra las ventajas de no orinarse, ya que puede ocurrir que los padres no le presten tanta atención cuando deja de escapársele la orina. Por este motivo, Chicote explica a los padres que se les tiene que demostrar que hacerlo bien sí resulta ventajoso.
Pautas para los padres
Pero, ¿en qué consiste la participación de los padres? A menudo, cuando a un niño se le escapa la orina en la cama, los progenitores acuden para ponerle sábanas limpias y cambiarle la ropa. Una de las medidas que aconsejan los psicólogos es que no lo hagan, sino que sea el niño el que tenga que levantarse, cambiarse el pijama y poner sábanas limpias. De esta forma, el pequeño puede comprender que el hecho de ensuciarse no va a atraer la atención de sus padres como esperaba, sino que va a tener una consecuencia para él.
A los padres también se les deben enseñar pautas de lo que no deben hacer. Por ejemplo, no pueden castigar al niño ni tampoco ponerle pañales durante mucho tiempo. Muchas familias los usan para evitar que se enfríe, pero con este sistema sólo potencian la insensibilidad de la piel del pequeño y, en cierto modo, le están dando permiso para orinarse y que no tenga que esforzarse en aprender a reconocer la incomodidad de las primeras gotas. Cuando se recurre a los pañales, el niño no asocia las señales internas de la vejiga a despertarse.
Y, por último, también se recomienda que restrinjan los líquidos, a medida que se acerca la noche, a los niños con enuresis nocturna. Durante el día no se aconseja porque es importante que el niño o niña tengan determinadas sensaciones, como la vejiga llena, y ciertas incomodidades, como las primeras gotas, detalla Chicote.
TRATAMIENTO DE LA ENCOPRESIS
El tratamiento de la encopresis es similar al de la enuresis. Primero se deben descartar las causas orgánicas y se pide a los padres que realicen un registro de defecaciones de los niños. En este caso, en que también se trabaja mucho con los padres, la media de duración del tratamiento es de unas diez sesiones aunque, de nuevo, depende del niño y su familia. Si los niños afectados por este trastorno de eliminación sufren estreñimiento, deben seguir un tratamiento dietético.
Como en el caso de la enuresis, a los niños con encopresis se les entrena en hábitos defecatorios y se utiliza una estrategia de recompensa y de reforzamiento e, igualmente, debe ser el niño quien se quite la ropa, la lleve a la lavadora, busque su ropa limpia y se cambie. Otro ejercicio que se aconseja en estos casos es una práctica positiva, es decir, dejar que el niño permanezca solo en su habitación tranquilamente sentado durante diez minutos. Después, repetir el ejercicio en el retrete, de modo que permanezca sentado otros diez minutos y, finalmente, repetir la secuencia en los mismos horarios, coincidiendo con las horas de comida para que vaya adquiriendo los hábitos de defecación adecuados, explica Silvia Chicote.
Tanto los niños enuréticos como los encopréticos pueden recaer, lo que "puede ser muy traumático", pero no por ello deben dejar de intentarlo. Los padres no deben dar estos casos por perdidos, al final, ambos trastornos se acaban solucionando. Muchas veces las recaídas se deben a que no se ha acertado bien en las causas que los desencadenan. Entonces se trata de buscar de nuevo la causa de la conducta afectada, revisarla y volver a empezar el tratamiento
Los trastornos de eliminación de orina y heces, enuresis y encopresis respectivamente, son característicos de la infancia. Pueden tener una causa orgánica o psicológica y, en ambos casos, tienen tratamiento. La terapia psicológica comprende la enseñanza para aprender a controlar los esfínteres, psicoterapia y una serie de recomendaciones para los padres del niño afectado sobre cómo afrontar la situación y resolverla
Escapes involuntarios
La enuresis es el escape involuntario de la orina durante la noche; la incapacidad de retenerla durante el día se denomina incontinencia diurna. Consiste en la aparición de una emisión repetida de la orina en la cama o en la ropa, superados los cuatro años de edad, tiempo en el que el niño debería haber adquirido la continencia urinaria. Para que se pueda hablar de enuresis también hay que hablar de frecuencia: este tipo de incontinencia tiene que ser de dos episodios semanales al menos durante tres meses consecutivos, precisa Silvia Chicote, psicóloga especializada en niños del centro Psicomaster, de Madrid.
Hay dos tipos de enuresis: la primaria y la secundaria. La principal diferencia entre ambas es que, en la enuresis primaria, el niño nunca han llegado a conseguir el control de la orina, mientras que en el caso de la secundaria sí que lo han conseguido, aunque durante un periodo corto de tiempo, unos pocos meses a lo sumo.
La encopresis, por su parte, es la evacuación repetida de heces en cualquier lugar inadecuado que no sea el retrete, como en el suelo o la ropa. Y al menos tiene que producirse una vez a la semana durante tres meses consecutivos. La edad a partir de la cual puede considerarse encopresis son los cuatro años, añade Chicote.
En el 70% de los casos la enuresis no está diagnosticada
Niños afectados
Por lo general, la enuresis es el transtorno o la eliminación más común y, por ello, más estudiado. Este trastorno ocurre por igual en menores de ambos sexos, en cambio, la encopresis es más frecuente en niños. La enuresis nocturna afecta al 15% de los niños de cinco años, según El Libro Blanco "La Enuresis Monosintomática Primaria en España", una iniciativa de la Asociación Española contra la Enuresis, de varias sociedades científicas y de la compañía Ferring que se hizo pública en 2007.
Del documento se extrae que el porcentaje de afectados va disminuyendo con la edad. En el 70% de los casos no está diagnosticada y, según un 83% de los casi 1.200 pediatras a los que se consultó para elaborar el libro, los progenitores no acuden a la consulta por sentir vergüenza de que sus hijos sigan teniendo pérdidas de orina.
A los cuatro años se les escapan las heces al 3% de los niños una vez por semana y, a los siete años, la encopresis tiene una prevalencia del 2,3% en los niños y del 0,7% en las niñas, según datos de un documento sobre los "Trastornos de la eliminación: enuresis y encopresis", de Reyes Hernández Guillén, pediatra del Centro de Salud El Restón, y de Mercedes Rodrigo Alfageme, del servicio de Psiquiatría Infantil, del Hospital Materno-Infantil del 12 de Octubre, ambos de Madrid.
Además, se sabe que un tercio de los niños con encopresis sufre también enuresis nocturna, un 20% enuresis diurna y que un 10% de las niñas padecen infecciones urinarias recurrentes, según el mismo trabajo de Hernández y Rodrigo.
Cuando un niño mayor de cuatro años se orina durante la noche es importante acudir al pediatra para descartar alguna causa orgánica
El trastorno enurético puede tener causas orgánicas por afecciones urológicas, irritaciones o algún proceso infeccioso como una cistitis, pero también puede ser debido a que la capacidad funcional de la vejiga esté disminuida, lo que implica que los niños enuréticos necesiten ir más con más frecuencia al baño. Otras veces puede tener su origen en trastornos neuromusculares que afectan al sistema genitourinario, en la médula espinal o en los centros del cerebro.
Cuando un niño de más de cuatro años orina durante la noche y fuera del retrete, es importante acudir al pediatra para que descarte cualquiera de las causas orgánicas anteriores. Una vez descartadas, si se determina que la enuresis tiene un origen psicológico, se hace necesario acudir a un psicólogo, advierte Chicote. Según información de esta especialista, las causas psicológicas que están detrás de la enuresis también pueden ser múltiples: falta de aprendizaje del niño porque no se le ha enseñado correctamente; insensibilización de la piel a la humedad, favorecida o provocada por usar pañales hasta edades avanzadas, lo que priva al menor del mecanismo de emergencia que le lleva a despertarse cuando se siente húmedo.
También puede haber un interés del niño por conseguir una reacción de sus padres, porque obtiene algo, que habitualmente es su atención. O problemas emocionales, como cambio de colegio, de casa, la separación de los padres o el nacimiento de un hermano pequeño; en definitiva, cualquier factor que altere el entorno del niño.
De la misma manera, detrás de las causas de la encopresis puede estar el estreñimiento: los niños retienen tanto las heces que la presión del colon vence al esfínter y se producen evacuaciones involuntarias
Tratamiento conductual
"Utilizamos ténicas conductuales porque son los procedimientos más seguros, no tienen efectos secundarios y consiguen más curaciones a corto y a largo plazo", informa Silvia Chicote, psicóloga especializada en niños, acerca del abordaje terapéutico. El tratamiento de la enuresis se dirige a corregir los defectos de aprendizaje que existen detrás, a encontrar su causa y a utilizar técnicas conductuales para que el niño aprenda a controlar la micción. Y la duración del tratamiento varía notablemente de un niño a otro. Depende del origen del trastorno y de si éste está asociado a problemas emocionales. En promedio, duran unas diez sesiones.
Entre otros aspectos, se trabaja para que los niños afectados aumenten la capacidad funcional de su vejiga a través de una serie de ejercicios: mediante un entrenamiento se les enseña a aguantar las contracciones del detrusor (músculo que envuelve la vejiga), a retener la orina y a aumentar la capacidad de la vejiga. También se les prescriben ejercicios para que fortifiquen sus esfínteres, cortando el flujo de la orina, mientras están miccionando.
Para que fortifiquen el esfínter también se les puede proveer de unos aparatos antienuréticos o de alarma (el Pipí-stop), provistos de un sensor de humedad y un timbre que se activa ante las primeras gotas de orina que se escapan. Al encenderse esta alarma, el pequeño tiene que despertarse, cerrar el esfínter y levantarse para ir al baño y terminar de orinar. Este sistema se debe mantener hasta que el niño afectado haya pasado dos semanas seguidas sin pérdidas de orina nocturnas; después se le puede retirar gradualmente.
No hay que castigar al niño afectado ni tampoco ponerle pañales durante mucho tiempo
Sin embargo, todo este entrenamiento se debe acompañar de un refuerzo por parte de los progenitores para que el niño descubra las ventajas de no orinarse, ya que puede ocurrir que los padres no le presten tanta atención cuando deja de escapársele la orina. Por este motivo, Chicote explica a los padres que se les tiene que demostrar que hacerlo bien sí resulta ventajoso.
Pautas para los padres
Pero, ¿en qué consiste la participación de los padres? A menudo, cuando a un niño se le escapa la orina en la cama, los progenitores acuden para ponerle sábanas limpias y cambiarle la ropa. Una de las medidas que aconsejan los psicólogos es que no lo hagan, sino que sea el niño el que tenga que levantarse, cambiarse el pijama y poner sábanas limpias. De esta forma, el pequeño puede comprender que el hecho de ensuciarse no va a atraer la atención de sus padres como esperaba, sino que va a tener una consecuencia para él.
A los padres también se les deben enseñar pautas de lo que no deben hacer. Por ejemplo, no pueden castigar al niño ni tampoco ponerle pañales durante mucho tiempo. Muchas familias los usan para evitar que se enfríe, pero con este sistema sólo potencian la insensibilidad de la piel del pequeño y, en cierto modo, le están dando permiso para orinarse y que no tenga que esforzarse en aprender a reconocer la incomodidad de las primeras gotas. Cuando se recurre a los pañales, el niño no asocia las señales internas de la vejiga a despertarse.
Y, por último, también se recomienda que restrinjan los líquidos, a medida que se acerca la noche, a los niños con enuresis nocturna. Durante el día no se aconseja porque es importante que el niño o niña tengan determinadas sensaciones, como la vejiga llena, y ciertas incomodidades, como las primeras gotas, detalla Chicote.
TRATAMIENTO DE LA ENCOPRESIS
El tratamiento de la encopresis es similar al de la enuresis. Primero se deben descartar las causas orgánicas y se pide a los padres que realicen un registro de defecaciones de los niños. En este caso, en que también se trabaja mucho con los padres, la media de duración del tratamiento es de unas diez sesiones aunque, de nuevo, depende del niño y su familia. Si los niños afectados por este trastorno de eliminación sufren estreñimiento, deben seguir un tratamiento dietético.
Como en el caso de la enuresis, a los niños con encopresis se les entrena en hábitos defecatorios y se utiliza una estrategia de recompensa y de reforzamiento e, igualmente, debe ser el niño quien se quite la ropa, la lleve a la lavadora, busque su ropa limpia y se cambie. Otro ejercicio que se aconseja en estos casos es una práctica positiva, es decir, dejar que el niño permanezca solo en su habitación tranquilamente sentado durante diez minutos. Después, repetir el ejercicio en el retrete, de modo que permanezca sentado otros diez minutos y, finalmente, repetir la secuencia en los mismos horarios, coincidiendo con las horas de comida para que vaya adquiriendo los hábitos de defecación adecuados, explica Silvia Chicote.
Tanto los niños enuréticos como los encopréticos pueden recaer, lo que "puede ser muy traumático", pero no por ello deben dejar de intentarlo. Los padres no deben dar estos casos por perdidos, al final, ambos trastornos se acaban solucionando. Muchas veces las recaídas se deben a que no se ha acertado bien en las causas que los desencadenan. Entonces se trata de buscar de nuevo la causa de la conducta afectada, revisarla y volver a empezar el tratamiento
Técnicas para reducir el estrés
Técnicas para reducción y control del estrés
Aromaterapia
Es una técnica oriental muy antigua, cuyo efecto es relajar.
Consiste en utilizar aceites de hierbas y otras plantas aromáticas para que aplicadas en el cuerpo, logren la relajación o el alivio de un dolor o trastorno.
Los aceites, se extraen de hojas, flores, raíces, semillas, frutos, corteza o resina de diferentes plantas y se diluyen en agua o en un aceite sin perfume, como el de jojoba.
Estas soluciones se pueden aplicar sobre la piel con un relajante masaje, inhalar en forma de vapor o del humo generado por velas aromáticas, agregarse en forma de burbujas o aceites en el agua del baño o usarse en compresas que se aplican en determinados lugares del cuerpo.
La aromaterapia forma parte de muchos de los tratamientos de masajes relajantes y reductivos que últimamente se ofrecen en los servicios de spa.
Muchas de las esencias aromáticas sirven para diferentes cosas: problemas tensionales, emocionales, dolores de cabeza, tensión premenstrual, dolor muscular, trastornos cutáneos, fatiga, insomnio y estrés entre otros.
Esta técnica, basa su eficacia en dos mecanismos básicos: el sentido del olfato y la capacidad absorbente de la piel. Los terapeutas afirman que la inhalación de determinadas fragancias hace que el cerebro libere productos químicos que combaten el estrés y la fatiga. También creen que algunos aceites ejercen un efecto medicinal tras ser absorbidos por la piel.
Científicamente y por regla general, los médicos tradicionales descartan cualquier beneficio terapéutico que no sea el efecto del placebo y la relajación.
Además del masaje, el aromaterapeuta, puede recomendar un baño de inmersión caliente con algunas gotas de uno o dos aceites aromáticos, lo que ocasiona somnolencia o produce una estimulante tonificadora.
Entre los aceites aromáticos más frecuentemente utilizados, están:
- Enebrina, (Bayas maduras) fragancia acre, picante, se usa en vaporizaciones, baños, compresas y masajes por sus efectos calmantes; se utiliza también para dolores musculares y el eccema.
- Eucalipto, (hojas) aroma fuerte y tonificante, como el de alcanfor. Se usa para tratar la congestión nasal y respiratoria, en vaporizaciones, compresas, baños y masajes; alivia el dolor muscular y combate la fatiga; se aplica en la piel como repelente contra los insectos.
- Geranio, (hojas) fragancia acre, picante. Se usa en vaporizaciones, baños, masajes y enjuagues bucales y de garganta; se le considera un aceite fundamental para tratar el estrés, el acné, el eccema y las heridas pequeñas.
- Jazmín, (flores) Aroma floral tenue. Se usa en masajes faciales y baños, por sus propiedades relajantes.
- Lavanda, (flores) Fragancia floral, fuerte y dulce. Se usa en vaporizaciones, baños compresas y masajes para tratar el estrés y las heridas cutáneas; se dice que tiene propiedades antisépticas y antiinflamatorias.
- Manzanilla,(flores secas) Aroma suave, dulce. Por sus efectos sedantes se una en vaporizaciones, baños, compresas, mascarillas faciales o masaje; se dice que también alivia el eccema y mitiga el dolor muscular.
- Menta (hojas) Aroma fresco y tonificante. Se inhala o se usa en baños, gárgaras y enjuagues bucales para malestares digestivos, garganta irritada, úlceras bucales y comezón en la piel.
- Pino (resina) Tonificante, con olor a madera. Se usa en vaporizaciones, baños y masajes para aliviar dolores musculares y tratar la congestión nasal y del pecho.
- Rosa (flores) Duradera fragancia floral. Se usa en baños y masajes por sus cualidades tranquilizantes; también se usa para tratar problemas menstruales y otros trastorno femeninos de la reproducción.
- Salvia esclarea (flores) Aroma fuerte y picante. Se inhala o usa en vaporizaciones, baños, compresas o masajes para aliviar ansiedad, el estrés, la inflamación de la piel y la congestión respiratoria.
Hipnoterapia
(Sobre hipnosis y psicoterapia)
"'Hipnotismo' e 'hipnosis' son términos aplicados a una forma única y compleja de conducta inusual, pero normal, que puede probablemente ser inducida en toda persona normal bajo condiciones adecuadas y también en personas que sufren diferentes tipos de anormalidades. Es principalmente un estado psicológico especial, con ciertos atributos psicológicos que lo hacen parecido al sueño fisiológico pero sólo superficialmente, y caracterizados por un funcionamiento del individuo en un nivel de percatamiento llamado, por conveniencia en la conceptualización, percatamiento inconsciente o subconsciente. Cuando el sujeto esta hipnotizado, o en trance hipnótico, puede pensar, actuar y conducirse tan adecuadamente, y a menudo mejor, que como puede hacerlo en el estado psicológico común despierto, siendo esto posible por la intensidad de su atención a la tarea y por estar libre de distracciones. No está, como comúnmente se cree, sin poder de decisión o bajo el deseo del hipnotista. La relación entre el hipnotista y el sujeto es mas bien de cooperación interpersonal, basada en consideraciones razonables mutuamente aceptables.
Por lo tanto el sujeto no puede ser forzado a hacer cosas en contra de su deseo, sino que puede ser ayudado a lograr las metas que desea. Los fracasos en la terapia hipnótica de los pacientes revelan limitaciones de la hipnosis en lograr incluso las metas que son deseadas por la persona, y los más extensos y confiables estudios experimentales desacreditan la posibilidad de utilizar la hipnosis para propósitos antisociales."
La hipnosis y el trance hipnótico son experiencias normales que pueden desarrollarse naturalmente durante períodos de introspección. No hay necesidad de misteriosas manipulaciones de los sujetos. Uno realmente no controla los sujetos en hipnosis, más bien les provee de estímulos y oportunidades para una absorción interna que a veces conduce a estados de conciencia reconociblemente diferentes.
Nosotros vemos a la hipnoterapia como un proceso por el cual ayudamos a la gente a utilizar sus propias asociaciones mentales, recuerdos y potenciales de vida para lograr sus propias metas terapéuticas. La sugestión hipnótica puede facilitar la utilización de habilidades y potenciales que ya existen dentro de una persona pero que permanecen sin usarse o poco desarrollados por una falta de entrenamiento o de comprensión. El hipnoterapeuta cuidadosamente explora la individualidad de un paciente para saber qué aprendizajes de vida, experiencias y destrezas mentales son disponibles para enfrentar el problema. El terapeuta entonces facilita una aproximación a la experiencia de trance dentro de la cual el paciente puede utilizar estas únicas y personales respuestas internas para lograr metas terapéuticas.
Nuestro abordaje puede ser visto como un proceso en tres pasos:
1- un período de preparación durante el cual el terapeuta explora el repertorio de experiencias de vida del paciente y facilita marcos de referencia constructivos para orientar al paciente hacia el cambio terapéutico.
2- una activación y utilización de los propios recursos mentales del paciente durante un período de trance terapéutico.
3- un cuidadoso reconocimiento, evaluación y ratificación del cambio terapéutico que tuvo lugar.
Trance terapéutico es un período durante el cual las limitaciones de los marcos de referencia y creencias son alterados temporariamente para que se pueda ser receptivo a otros modelos de asociación y formas de funcionamiento mental que conducen a la resolución de problemas.
Vemos la dinámica de la inducción al trance y su utilización como una experiencia muy personal donde el terapeuta ayuda al paciente a encontrar sus propios caminos individuales. La inducción de trance no es un proceso estandardizado que puede ser aplicado del mismo modo a todos. No hay método o técnica que siempre funcione con todos o incluso con la misma persona todas las veces en distintas ocasiones. Por eso es que nosotros hablamos de "approaches" (abordajes) a la experiencia de trance. De esa manera enfatizamos que tenemos muchos medios de facilitar, guiar o enseñar cómo uno puede ser llevado a experimentar el estado de receptividad que llamamos trance terapéutico.
De todas maneras no tenemos un método universal para efectuar el mismo estado uniforme de trance en todos.
La mayoría de la gente con problemas puede ser guiada a experimentar su propia y única variedad de trance cuando entiende que puede ser de utilidad. El arte del hipnoterapeuta está en ayudar al paciente a lograr una comprensión que lo ayudará a dejar de lado algunas de las limitaciones de su visión común del mundo de todos los días, de tal forma que pueda alcanzar un estado de receptividad a lo nuevo y creativo que hay en su interior."
La respiración
Un control adecuado de nuestra respiración es una de las estrategias más sencillas para hacer frente a las situaciones de estrés y manejar los aumentos en la activación fisiológica provocados por estas.
Unos hábitos correctos de respiración son muy importantes porque aportan al organismo el suficiente oxigeno para nuestro cerebro. El ritmo actual de vida favorece la respiración incompleta que no utiliza la total capacidad de los pulmones.
El objetivo de las técnicas de respiración es facilitar el control voluntario de la respiración y automatizarlo para que pueda ser mantenido en situaciones de estrés.
Vamos a pasar a realizar una serie de ejercicios sobre la respiración.
EJERCICIOS DE RESPIRACIÓN
Ejercicio 1:Inspiración abdominal
El objetivo de este ejercicio es que la persona dirija el aire inspirado a la parte inferior de los pulmones. Para lo cual se debe colocar una mano en el vientre y otra encima del estómago. En el ejercicio debe de percibir movimiento al respirar en la mano situada en el vientre, pero no en la situada sobre el estómago.
Al principio puede parecer difícil, pero es una técnica que se controla en unos 15-20 minutos.
Ejercicio 2: Inspiración abdominal y ventral
El objetivo es aprender a dirigir el aire inspirado a la zona inferior y media de los pulmones. Es igual al ejercicio anterior, sin embargo una vez llenado la parte inferior se debe llenar también la zona media. Se debe notar movimiento primero en la mano del abdomen y después en la del vientre.
Ejercicio 3: Inspiración abdominal, ventral y costal
El objetivo de este ejercicio es lograr una inspiración completa. La persona, colocada en la postura del ejercicio anterior debe llenar primero de aire la zona del abdomen, después el estómago y por último el pecho.
Ejercicio 4: Espiración
Este ejercicio es continuación del 3º, se deben realizar los mismos pasos y después, al espirar, se deben de cerrar los labios de forma que al salir del aire se produzca un breve resoplido. La espiración debe ser pausada y controlada.
Ejercicio 5: Ritmo inspiración - espiración
Este ejercicio es similar al anterior pero ahora la inspiración se hace de forma continua, enlazando los tres pasos (abdomen, estomago y pecho). La espiración se hace parecido al ejercicio anterior, pero se debe procurar hacerlo cada vez más silencioso.
Ejercicio 6: Sobregeneralización
Este es el paso crucial. Aquí se debe de ir utilizando estos ejercicios en situaciones cotidianas (sentados, de pie, caminando, trabajando, etc.). Hay que ir practicando en las diferentes situaciones: con ruidos, con mucha luz, en la oscuridad, con mucha gente alrededor, solos, etc.
Abrazoterapia
Parece increíble todo lo que puede curar, compensar, mejorar y prevenir un simple y amoroso abrazo.
Está comprobado que el contacto físico, mucho más allá del contenido sexual, tiene poderes curativos y amplía nuestro bienestar emocional.
Cuando nos tocamos y nos abrazamos con espíritu solidario y alegre, llevamos vida a nuestros sentidos y reafirmamos la confianza en nuestros propios sentimientos.
También es una forma de expresar lo que sentimos más allá de las palabras. Es el idioma universal de los abrazos. No solo debemos utilizar el lenguaje también debemos utilizar la sabiduría intuitiva, sin palabras y escuchar con el corazón. Así percibiremos el significado más profundo del misterio al que llamamos amor.
Los abrazos, además de hacernos sentir bien, se emplean para aliviar el dolor, la depresión y la ansiedad. Provocan alteraciones fisiológicas positivas en quien toca y en quien es tocado. Acrecienta la voluntad de vivir a los enfermos. Es de todos bien sabido que cuatro abrazos al día son necesarios para sobrevivir, ocho para mantenerse y doce para crecer como personas.
Veamos algunas clases de abrazos y pregúntate ¿con qué frecuencia y qué tipo de abrazos utilizas tú para sorprender a los tuyos?
- Abrazo del oso: es el típico de padres e hijos, donde el más grande envuelve con su cuerpo al más pequeño.
- Abrazo y contacto de mejillas: Uno coloca los brazos sobre los hombros del otro, a la vez que le da un beso en cada mejilla. Implica consuelo, bondad, consideración.
- Abrazo oriental: Ambos entrelazan los brazos con el cuerpo del otro. Se busca el contacto espiritual con todo el cuerpo del otro. Se acompaña con una inspiración y es el más largo. Se ponen en contacto los espíritus de las personas a través del cuerpo físico.
- Abrazo de a tres: Para padres con hijos o varios amigos. Implica consuelo, felicidad. La persona abrazada se siente totalmente a salvo.
- Abrazo de costado: El brazo de uno se pasa por el hombro o la cintura del otro. Ideal para pasear acompañados, disfrutando del paisaje.
- Abrazo de corazón: Largo, intenso, cálido, brota directamente del corazón. Surge en cualquier momento para saludar, recordar fechas especiales, expresar alegría. Ofrece ternura y amor incondicional.
¿Qué nos brinda un abrazo?
SEGURIDAD: No importa cuál sea nuestra edad ni nuestra posición en la vida, todos necesitamos sentirnos seguros. Si no lo conseguimos actuamos de forma ineficiente y nuestras relaciones interpersonales declinan.
PROTECCIÓN: El sentirnos protegidos es importante para todos, pero lo es más para los niños y los ancianos quienes dependen del amor de quienes los rodean.
CONFIANZA: La obtendremos de la sensación de seguridad y protección que recibimos. La confianza nos puede hacer avanzar cuando el miedo se impone a nuestro deseo de participar con entusiasmo en algún desafío de la vida.
FORTALEZA: Quizá pensamos que la fortaleza es una energía desarrollada gracias a la decisión de un individuo pero siempre podemos transmitir nuestra fuerza interior convirtiéndola en un don para el prójimo para confirmar y aumentar la energía ajena. Cuando transferimos nuestra energía con un abrazo, aumentan nuestras propias fuerzas.
SANACIÓN: Nuestra fortaleza se convierte en poderosa energía curativa cuando la transmitimos por medio del abrazo. El contacto físico y el abrazo imparten una energía vital capaz de sanar o aliviar dolencias menores.
AUTOVALORACIÓN: El reconocimiento de que valemos es la base de toda satisfacción y todo éxito en nuestra vida. Mediante el abrazo podemos transmitir el mensaje de reconocimiento al valor y excelencia de cada individuo.
Humor
El buen humor genera mayor productividad y disminuye el estrés.
El humor es un resorte motivador por excelencia, que además de ser una válvula de escape para la tensión, propicia la creatividad y ganas de trabajar. Los especialistas coinciden en que el sentido del humor se trata de tener una actitud positiva ante las vida, "ver desde una perspectiva que ayude a encontrar soluciones más creativas".
El humor debe ser considerado como un coadyuvante del bienestar, del mejoramiento de la organización y de la persona.
El humor conlleva la solución de conflictos, resistencia a la excesiva carga de estrés y establece una comunidad más fluida, excelente medicina que reduce la tensión, ansiedad y depresión.
El masaje
Cuando nuestros músculos se encuentran tensos o han sido sometidos a demasiado esfuerzo acumulan sustancias de desecho que causan dolor, rigidez, e incluso, espasmos musculares. Al incrementar la circulación hacia y desde los músculos, el masaje acelera la eliminación de estas sustancias tóxicas y dañinas. A la vez, el masaje hace que llegue sangre y oxígeno fresco a los tejidos con lo que se aligera el proceso de recuperación de lesiones y de numerosas enfermedades.
Pero esto es sólo el comienzo. A partir de los últimos quince años se ha acumulado una gran cantidad de evidencia que demuestra que el masaje posee una impresionante lista de beneficios tanto para la salud de nuestro cuerpo como de nuestra mente. Esto incluso en áreas que muchos ni siquiera sospechaban. Veamos:
La salud de nuestro organismo depende de la salud de nuestras células. Las células a su vez dependen de un abundante flujo de sangre y linfa. El masaje mejora la circulación de la sangre y el flujo de la linfa. Esto ayuda a llevar nutrientes a las células y a eliminar impurezas y sustancias tóxicas.
El masaje también aumenta la capacidad de la sangre para transportar oxígeno. De hecho se sabe que el masaje ayuda a aumentar los glóbulos rojos y blancos de la sangre.
Ayuda a liberar sustancias llamadas endorfinas que nos dan una sensación de bienestar y ayudan a combatir el dolor.
Cuando se combina con una dieta adecuada y ejercicio el masaje ayuda a restaurar el contorno del cuerpo y a disminuir los depósitos de grasa.
Ayuda a que los músculos mantengan su flexibilidad.
Ayuda a reducir el estrés. Si recordamos que más de dos terceras partes de las enfermedades están relacionadas con el estrés nos daremos cuenta de una de las razones por las que el masaje es tan beneficioso para la salud.
Ayuda a combatir la depresión y los estados de ánimo negativos.
El masaje terapéutico ha probado ser efectivo como medio para aliviar condiciones tales como dolores de cabeza causados por tensión nerviosa y dolores musculares de espalda, así como para mejorar la condición de la piel.
Un creciente número de médicos y otros profesionales de la salud recomiendan el masaje para aliviar problemas tales como sinusitis, artritis, alergias, dolores de cabeza y lesiones deportivas.
Hay distintos tipos de masaje terapéutico. Entre ellos se encuentran el masaje sueco, que es un masaje relativamente suave que promueve la relajación. Otros tipos de masaje emplean técnicas de acupresión o van dirigidos a los tejidos profundos. El (o la) masajista puede combinar varias de estas técnicas durante una sesión de masaje.
Una sesión de masaje puede tomar desde quince minutos hasta una hora. Por lo regular una sesión de quince minutos se limita a la espalda y los hombros y se da con la persona sentada en una silla especialmente diseñada para este propósito. Las sesiones de una hora, por lo general cubren el cuerpo entero desde la cabeza hasta los pies, y en estos casos se emplea una mesa acojinada y aceites especialmente preparados.
El masaje puede emplearse solo o como parte de un plan para mejorar la salud en el que se incluyan otros elementos tales como la alimentación, el ejercicio, o la meditación.
Musicoterapia
La música influye sobre el ritmo respiratorio, la presión arterial, las contracciones estomacales y los niveles hormonales. Los ritmos cardiacos se aceleran o se vuelven más lentos de forma tal que se sincronizan con los ritmos musicales. También se sabe que la música puede alterar los ritmos eléctricos de nuestro cerebro.
Si uno cierra los ojos por un minuto y escucha al mundo en derredor escucha bocinas, martillos, gotas de lluvia, niños riendo, una orquesta sinfónica, etc. La terapia musical sostiene que lo que uno escucha puede afectar la salud positiva o negativamente. El sonido puede ser un gran sanador.
Los terapistas musicales utilizan el sonido para ayudar con una amplia variedad de problemas médicos, que van desde la enfermedad de Alzheimer hasta el dolor de muelas. Los doctores en medicina conocen acerca del poder del sonido. Los investigadores han producido evidencia de la habilidad de la música para disminuir el dolor, mejorar la memoria y reducir el estrés.
Conclusión
Son muchas las técnicas que existen para permitir al individuo sobrellevar el estrés, es decir convivir con él sin que nos ahogue o nos haga daño y cada día vemos una mayor variedad de servicios que se ofrecen para aprender a controlarlo. También podemos ver que nos afecta en formas muy diferentes a todos y cada uno de nosotros, por eso probablemente existe esa variedad de técnicas. Por tanto lo importante es aprender a ver en el interior nuestro para reconocer los síntomas del estrés y manejarlo antes de que él nos maneje a nosotros.
El hecho de asistir o utilizar una técnica para el manejo del estrés y poder controlar sus efectos nocivos no quiere decir que ya hemos curado una enfermedad que surgió a partir del mismo, debemos también acudir al médico respectivo para evitar mayores complicaciones.
El estrés afecta a los niños de igual forma que lo hace con los adultos, no debemos olvidar esto, quizá seremos los maestros quienes estemos poniendo una parte de estrés en el mundo infantil, debemos poner en practica técnicas contra el estrés en nuestras aulas.
Es necesario que en el mundo acelerado y cambiante que vivimos, nos demos tiempo para apreciar esos pequeños grandes momentos como el de un atardecer o jugar con los niños, pues como lo ha demostrado este trabajo a pesar de que el estrés es una enfermedad de nuestros tiempos también tiene cura y es posible de evitar o minimizar en sus efectos, siendo esencial que seamos consientes de cómo debemos llevar una vida sana y equilibrar nuestras responsabilidades con nuestro derecho a una vida de calidad para nosotros y nuestras familias.
Bibliografía
López Roseífi Daniel. Estrés, como entenderlo, entenderse y vencerlo. Documento sin editorial. 2003
Pulití Afilio Raúl. El Manejo del Estrés. Documento sin editorial. 2003
Gastón de Mézerville. Ejes de Salud Mental. Edición Preliminar, Universidad de Costa Rica. 2001
Gutiérrez Lanzas Ledia. Técnicas para el manejo del estrés. Miami 2001
Woolfolk, Anita. 1996 Psicología Educativa. 6ta.ed. Prentice may
Hispanoamericana, S.A. México
Aromaterapia
Es una técnica oriental muy antigua, cuyo efecto es relajar.
Consiste en utilizar aceites de hierbas y otras plantas aromáticas para que aplicadas en el cuerpo, logren la relajación o el alivio de un dolor o trastorno.
Los aceites, se extraen de hojas, flores, raíces, semillas, frutos, corteza o resina de diferentes plantas y se diluyen en agua o en un aceite sin perfume, como el de jojoba.
Estas soluciones se pueden aplicar sobre la piel con un relajante masaje, inhalar en forma de vapor o del humo generado por velas aromáticas, agregarse en forma de burbujas o aceites en el agua del baño o usarse en compresas que se aplican en determinados lugares del cuerpo.
La aromaterapia forma parte de muchos de los tratamientos de masajes relajantes y reductivos que últimamente se ofrecen en los servicios de spa.
Muchas de las esencias aromáticas sirven para diferentes cosas: problemas tensionales, emocionales, dolores de cabeza, tensión premenstrual, dolor muscular, trastornos cutáneos, fatiga, insomnio y estrés entre otros.
Esta técnica, basa su eficacia en dos mecanismos básicos: el sentido del olfato y la capacidad absorbente de la piel. Los terapeutas afirman que la inhalación de determinadas fragancias hace que el cerebro libere productos químicos que combaten el estrés y la fatiga. También creen que algunos aceites ejercen un efecto medicinal tras ser absorbidos por la piel.
Científicamente y por regla general, los médicos tradicionales descartan cualquier beneficio terapéutico que no sea el efecto del placebo y la relajación.
Además del masaje, el aromaterapeuta, puede recomendar un baño de inmersión caliente con algunas gotas de uno o dos aceites aromáticos, lo que ocasiona somnolencia o produce una estimulante tonificadora.
Entre los aceites aromáticos más frecuentemente utilizados, están:
- Enebrina, (Bayas maduras) fragancia acre, picante, se usa en vaporizaciones, baños, compresas y masajes por sus efectos calmantes; se utiliza también para dolores musculares y el eccema.
- Eucalipto, (hojas) aroma fuerte y tonificante, como el de alcanfor. Se usa para tratar la congestión nasal y respiratoria, en vaporizaciones, compresas, baños y masajes; alivia el dolor muscular y combate la fatiga; se aplica en la piel como repelente contra los insectos.
- Geranio, (hojas) fragancia acre, picante. Se usa en vaporizaciones, baños, masajes y enjuagues bucales y de garganta; se le considera un aceite fundamental para tratar el estrés, el acné, el eccema y las heridas pequeñas.
- Jazmín, (flores) Aroma floral tenue. Se usa en masajes faciales y baños, por sus propiedades relajantes.
- Lavanda, (flores) Fragancia floral, fuerte y dulce. Se usa en vaporizaciones, baños compresas y masajes para tratar el estrés y las heridas cutáneas; se dice que tiene propiedades antisépticas y antiinflamatorias.
- Manzanilla,(flores secas) Aroma suave, dulce. Por sus efectos sedantes se una en vaporizaciones, baños, compresas, mascarillas faciales o masaje; se dice que también alivia el eccema y mitiga el dolor muscular.
- Menta (hojas) Aroma fresco y tonificante. Se inhala o se usa en baños, gárgaras y enjuagues bucales para malestares digestivos, garganta irritada, úlceras bucales y comezón en la piel.
- Pino (resina) Tonificante, con olor a madera. Se usa en vaporizaciones, baños y masajes para aliviar dolores musculares y tratar la congestión nasal y del pecho.
- Rosa (flores) Duradera fragancia floral. Se usa en baños y masajes por sus cualidades tranquilizantes; también se usa para tratar problemas menstruales y otros trastorno femeninos de la reproducción.
- Salvia esclarea (flores) Aroma fuerte y picante. Se inhala o usa en vaporizaciones, baños, compresas o masajes para aliviar ansiedad, el estrés, la inflamación de la piel y la congestión respiratoria.
Hipnoterapia
(Sobre hipnosis y psicoterapia)
"'Hipnotismo' e 'hipnosis' son términos aplicados a una forma única y compleja de conducta inusual, pero normal, que puede probablemente ser inducida en toda persona normal bajo condiciones adecuadas y también en personas que sufren diferentes tipos de anormalidades. Es principalmente un estado psicológico especial, con ciertos atributos psicológicos que lo hacen parecido al sueño fisiológico pero sólo superficialmente, y caracterizados por un funcionamiento del individuo en un nivel de percatamiento llamado, por conveniencia en la conceptualización, percatamiento inconsciente o subconsciente. Cuando el sujeto esta hipnotizado, o en trance hipnótico, puede pensar, actuar y conducirse tan adecuadamente, y a menudo mejor, que como puede hacerlo en el estado psicológico común despierto, siendo esto posible por la intensidad de su atención a la tarea y por estar libre de distracciones. No está, como comúnmente se cree, sin poder de decisión o bajo el deseo del hipnotista. La relación entre el hipnotista y el sujeto es mas bien de cooperación interpersonal, basada en consideraciones razonables mutuamente aceptables.
Por lo tanto el sujeto no puede ser forzado a hacer cosas en contra de su deseo, sino que puede ser ayudado a lograr las metas que desea. Los fracasos en la terapia hipnótica de los pacientes revelan limitaciones de la hipnosis en lograr incluso las metas que son deseadas por la persona, y los más extensos y confiables estudios experimentales desacreditan la posibilidad de utilizar la hipnosis para propósitos antisociales."
La hipnosis y el trance hipnótico son experiencias normales que pueden desarrollarse naturalmente durante períodos de introspección. No hay necesidad de misteriosas manipulaciones de los sujetos. Uno realmente no controla los sujetos en hipnosis, más bien les provee de estímulos y oportunidades para una absorción interna que a veces conduce a estados de conciencia reconociblemente diferentes.
Nosotros vemos a la hipnoterapia como un proceso por el cual ayudamos a la gente a utilizar sus propias asociaciones mentales, recuerdos y potenciales de vida para lograr sus propias metas terapéuticas. La sugestión hipnótica puede facilitar la utilización de habilidades y potenciales que ya existen dentro de una persona pero que permanecen sin usarse o poco desarrollados por una falta de entrenamiento o de comprensión. El hipnoterapeuta cuidadosamente explora la individualidad de un paciente para saber qué aprendizajes de vida, experiencias y destrezas mentales son disponibles para enfrentar el problema. El terapeuta entonces facilita una aproximación a la experiencia de trance dentro de la cual el paciente puede utilizar estas únicas y personales respuestas internas para lograr metas terapéuticas.
Nuestro abordaje puede ser visto como un proceso en tres pasos:
1- un período de preparación durante el cual el terapeuta explora el repertorio de experiencias de vida del paciente y facilita marcos de referencia constructivos para orientar al paciente hacia el cambio terapéutico.
2- una activación y utilización de los propios recursos mentales del paciente durante un período de trance terapéutico.
3- un cuidadoso reconocimiento, evaluación y ratificación del cambio terapéutico que tuvo lugar.
Trance terapéutico es un período durante el cual las limitaciones de los marcos de referencia y creencias son alterados temporariamente para que se pueda ser receptivo a otros modelos de asociación y formas de funcionamiento mental que conducen a la resolución de problemas.
Vemos la dinámica de la inducción al trance y su utilización como una experiencia muy personal donde el terapeuta ayuda al paciente a encontrar sus propios caminos individuales. La inducción de trance no es un proceso estandardizado que puede ser aplicado del mismo modo a todos. No hay método o técnica que siempre funcione con todos o incluso con la misma persona todas las veces en distintas ocasiones. Por eso es que nosotros hablamos de "approaches" (abordajes) a la experiencia de trance. De esa manera enfatizamos que tenemos muchos medios de facilitar, guiar o enseñar cómo uno puede ser llevado a experimentar el estado de receptividad que llamamos trance terapéutico.
De todas maneras no tenemos un método universal para efectuar el mismo estado uniforme de trance en todos.
La mayoría de la gente con problemas puede ser guiada a experimentar su propia y única variedad de trance cuando entiende que puede ser de utilidad. El arte del hipnoterapeuta está en ayudar al paciente a lograr una comprensión que lo ayudará a dejar de lado algunas de las limitaciones de su visión común del mundo de todos los días, de tal forma que pueda alcanzar un estado de receptividad a lo nuevo y creativo que hay en su interior."
La respiración
Un control adecuado de nuestra respiración es una de las estrategias más sencillas para hacer frente a las situaciones de estrés y manejar los aumentos en la activación fisiológica provocados por estas.
Unos hábitos correctos de respiración son muy importantes porque aportan al organismo el suficiente oxigeno para nuestro cerebro. El ritmo actual de vida favorece la respiración incompleta que no utiliza la total capacidad de los pulmones.
El objetivo de las técnicas de respiración es facilitar el control voluntario de la respiración y automatizarlo para que pueda ser mantenido en situaciones de estrés.
Vamos a pasar a realizar una serie de ejercicios sobre la respiración.
EJERCICIOS DE RESPIRACIÓN
Ejercicio 1:Inspiración abdominal
El objetivo de este ejercicio es que la persona dirija el aire inspirado a la parte inferior de los pulmones. Para lo cual se debe colocar una mano en el vientre y otra encima del estómago. En el ejercicio debe de percibir movimiento al respirar en la mano situada en el vientre, pero no en la situada sobre el estómago.
Al principio puede parecer difícil, pero es una técnica que se controla en unos 15-20 minutos.
Ejercicio 2: Inspiración abdominal y ventral
El objetivo es aprender a dirigir el aire inspirado a la zona inferior y media de los pulmones. Es igual al ejercicio anterior, sin embargo una vez llenado la parte inferior se debe llenar también la zona media. Se debe notar movimiento primero en la mano del abdomen y después en la del vientre.
Ejercicio 3: Inspiración abdominal, ventral y costal
El objetivo de este ejercicio es lograr una inspiración completa. La persona, colocada en la postura del ejercicio anterior debe llenar primero de aire la zona del abdomen, después el estómago y por último el pecho.
Ejercicio 4: Espiración
Este ejercicio es continuación del 3º, se deben realizar los mismos pasos y después, al espirar, se deben de cerrar los labios de forma que al salir del aire se produzca un breve resoplido. La espiración debe ser pausada y controlada.
Ejercicio 5: Ritmo inspiración - espiración
Este ejercicio es similar al anterior pero ahora la inspiración se hace de forma continua, enlazando los tres pasos (abdomen, estomago y pecho). La espiración se hace parecido al ejercicio anterior, pero se debe procurar hacerlo cada vez más silencioso.
Ejercicio 6: Sobregeneralización
Este es el paso crucial. Aquí se debe de ir utilizando estos ejercicios en situaciones cotidianas (sentados, de pie, caminando, trabajando, etc.). Hay que ir practicando en las diferentes situaciones: con ruidos, con mucha luz, en la oscuridad, con mucha gente alrededor, solos, etc.
Abrazoterapia
Parece increíble todo lo que puede curar, compensar, mejorar y prevenir un simple y amoroso abrazo.
Está comprobado que el contacto físico, mucho más allá del contenido sexual, tiene poderes curativos y amplía nuestro bienestar emocional.
Cuando nos tocamos y nos abrazamos con espíritu solidario y alegre, llevamos vida a nuestros sentidos y reafirmamos la confianza en nuestros propios sentimientos.
También es una forma de expresar lo que sentimos más allá de las palabras. Es el idioma universal de los abrazos. No solo debemos utilizar el lenguaje también debemos utilizar la sabiduría intuitiva, sin palabras y escuchar con el corazón. Así percibiremos el significado más profundo del misterio al que llamamos amor.
Los abrazos, además de hacernos sentir bien, se emplean para aliviar el dolor, la depresión y la ansiedad. Provocan alteraciones fisiológicas positivas en quien toca y en quien es tocado. Acrecienta la voluntad de vivir a los enfermos. Es de todos bien sabido que cuatro abrazos al día son necesarios para sobrevivir, ocho para mantenerse y doce para crecer como personas.
Veamos algunas clases de abrazos y pregúntate ¿con qué frecuencia y qué tipo de abrazos utilizas tú para sorprender a los tuyos?
- Abrazo del oso: es el típico de padres e hijos, donde el más grande envuelve con su cuerpo al más pequeño.
- Abrazo y contacto de mejillas: Uno coloca los brazos sobre los hombros del otro, a la vez que le da un beso en cada mejilla. Implica consuelo, bondad, consideración.
- Abrazo oriental: Ambos entrelazan los brazos con el cuerpo del otro. Se busca el contacto espiritual con todo el cuerpo del otro. Se acompaña con una inspiración y es el más largo. Se ponen en contacto los espíritus de las personas a través del cuerpo físico.
- Abrazo de a tres: Para padres con hijos o varios amigos. Implica consuelo, felicidad. La persona abrazada se siente totalmente a salvo.
- Abrazo de costado: El brazo de uno se pasa por el hombro o la cintura del otro. Ideal para pasear acompañados, disfrutando del paisaje.
- Abrazo de corazón: Largo, intenso, cálido, brota directamente del corazón. Surge en cualquier momento para saludar, recordar fechas especiales, expresar alegría. Ofrece ternura y amor incondicional.
¿Qué nos brinda un abrazo?
SEGURIDAD: No importa cuál sea nuestra edad ni nuestra posición en la vida, todos necesitamos sentirnos seguros. Si no lo conseguimos actuamos de forma ineficiente y nuestras relaciones interpersonales declinan.
PROTECCIÓN: El sentirnos protegidos es importante para todos, pero lo es más para los niños y los ancianos quienes dependen del amor de quienes los rodean.
CONFIANZA: La obtendremos de la sensación de seguridad y protección que recibimos. La confianza nos puede hacer avanzar cuando el miedo se impone a nuestro deseo de participar con entusiasmo en algún desafío de la vida.
FORTALEZA: Quizá pensamos que la fortaleza es una energía desarrollada gracias a la decisión de un individuo pero siempre podemos transmitir nuestra fuerza interior convirtiéndola en un don para el prójimo para confirmar y aumentar la energía ajena. Cuando transferimos nuestra energía con un abrazo, aumentan nuestras propias fuerzas.
SANACIÓN: Nuestra fortaleza se convierte en poderosa energía curativa cuando la transmitimos por medio del abrazo. El contacto físico y el abrazo imparten una energía vital capaz de sanar o aliviar dolencias menores.
AUTOVALORACIÓN: El reconocimiento de que valemos es la base de toda satisfacción y todo éxito en nuestra vida. Mediante el abrazo podemos transmitir el mensaje de reconocimiento al valor y excelencia de cada individuo.
Humor
El buen humor genera mayor productividad y disminuye el estrés.
El humor es un resorte motivador por excelencia, que además de ser una válvula de escape para la tensión, propicia la creatividad y ganas de trabajar. Los especialistas coinciden en que el sentido del humor se trata de tener una actitud positiva ante las vida, "ver desde una perspectiva que ayude a encontrar soluciones más creativas".
El humor debe ser considerado como un coadyuvante del bienestar, del mejoramiento de la organización y de la persona.
El humor conlleva la solución de conflictos, resistencia a la excesiva carga de estrés y establece una comunidad más fluida, excelente medicina que reduce la tensión, ansiedad y depresión.
El masaje
Cuando nuestros músculos se encuentran tensos o han sido sometidos a demasiado esfuerzo acumulan sustancias de desecho que causan dolor, rigidez, e incluso, espasmos musculares. Al incrementar la circulación hacia y desde los músculos, el masaje acelera la eliminación de estas sustancias tóxicas y dañinas. A la vez, el masaje hace que llegue sangre y oxígeno fresco a los tejidos con lo que se aligera el proceso de recuperación de lesiones y de numerosas enfermedades.
Pero esto es sólo el comienzo. A partir de los últimos quince años se ha acumulado una gran cantidad de evidencia que demuestra que el masaje posee una impresionante lista de beneficios tanto para la salud de nuestro cuerpo como de nuestra mente. Esto incluso en áreas que muchos ni siquiera sospechaban. Veamos:
La salud de nuestro organismo depende de la salud de nuestras células. Las células a su vez dependen de un abundante flujo de sangre y linfa. El masaje mejora la circulación de la sangre y el flujo de la linfa. Esto ayuda a llevar nutrientes a las células y a eliminar impurezas y sustancias tóxicas.
El masaje también aumenta la capacidad de la sangre para transportar oxígeno. De hecho se sabe que el masaje ayuda a aumentar los glóbulos rojos y blancos de la sangre.
Ayuda a liberar sustancias llamadas endorfinas que nos dan una sensación de bienestar y ayudan a combatir el dolor.
Cuando se combina con una dieta adecuada y ejercicio el masaje ayuda a restaurar el contorno del cuerpo y a disminuir los depósitos de grasa.
Ayuda a que los músculos mantengan su flexibilidad.
Ayuda a reducir el estrés. Si recordamos que más de dos terceras partes de las enfermedades están relacionadas con el estrés nos daremos cuenta de una de las razones por las que el masaje es tan beneficioso para la salud.
Ayuda a combatir la depresión y los estados de ánimo negativos.
El masaje terapéutico ha probado ser efectivo como medio para aliviar condiciones tales como dolores de cabeza causados por tensión nerviosa y dolores musculares de espalda, así como para mejorar la condición de la piel.
Un creciente número de médicos y otros profesionales de la salud recomiendan el masaje para aliviar problemas tales como sinusitis, artritis, alergias, dolores de cabeza y lesiones deportivas.
Hay distintos tipos de masaje terapéutico. Entre ellos se encuentran el masaje sueco, que es un masaje relativamente suave que promueve la relajación. Otros tipos de masaje emplean técnicas de acupresión o van dirigidos a los tejidos profundos. El (o la) masajista puede combinar varias de estas técnicas durante una sesión de masaje.
Una sesión de masaje puede tomar desde quince minutos hasta una hora. Por lo regular una sesión de quince minutos se limita a la espalda y los hombros y se da con la persona sentada en una silla especialmente diseñada para este propósito. Las sesiones de una hora, por lo general cubren el cuerpo entero desde la cabeza hasta los pies, y en estos casos se emplea una mesa acojinada y aceites especialmente preparados.
El masaje puede emplearse solo o como parte de un plan para mejorar la salud en el que se incluyan otros elementos tales como la alimentación, el ejercicio, o la meditación.
Musicoterapia
La música influye sobre el ritmo respiratorio, la presión arterial, las contracciones estomacales y los niveles hormonales. Los ritmos cardiacos se aceleran o se vuelven más lentos de forma tal que se sincronizan con los ritmos musicales. También se sabe que la música puede alterar los ritmos eléctricos de nuestro cerebro.
Si uno cierra los ojos por un minuto y escucha al mundo en derredor escucha bocinas, martillos, gotas de lluvia, niños riendo, una orquesta sinfónica, etc. La terapia musical sostiene que lo que uno escucha puede afectar la salud positiva o negativamente. El sonido puede ser un gran sanador.
Los terapistas musicales utilizan el sonido para ayudar con una amplia variedad de problemas médicos, que van desde la enfermedad de Alzheimer hasta el dolor de muelas. Los doctores en medicina conocen acerca del poder del sonido. Los investigadores han producido evidencia de la habilidad de la música para disminuir el dolor, mejorar la memoria y reducir el estrés.
Conclusión
Son muchas las técnicas que existen para permitir al individuo sobrellevar el estrés, es decir convivir con él sin que nos ahogue o nos haga daño y cada día vemos una mayor variedad de servicios que se ofrecen para aprender a controlarlo. También podemos ver que nos afecta en formas muy diferentes a todos y cada uno de nosotros, por eso probablemente existe esa variedad de técnicas. Por tanto lo importante es aprender a ver en el interior nuestro para reconocer los síntomas del estrés y manejarlo antes de que él nos maneje a nosotros.
El hecho de asistir o utilizar una técnica para el manejo del estrés y poder controlar sus efectos nocivos no quiere decir que ya hemos curado una enfermedad que surgió a partir del mismo, debemos también acudir al médico respectivo para evitar mayores complicaciones.
El estrés afecta a los niños de igual forma que lo hace con los adultos, no debemos olvidar esto, quizá seremos los maestros quienes estemos poniendo una parte de estrés en el mundo infantil, debemos poner en practica técnicas contra el estrés en nuestras aulas.
Es necesario que en el mundo acelerado y cambiante que vivimos, nos demos tiempo para apreciar esos pequeños grandes momentos como el de un atardecer o jugar con los niños, pues como lo ha demostrado este trabajo a pesar de que el estrés es una enfermedad de nuestros tiempos también tiene cura y es posible de evitar o minimizar en sus efectos, siendo esencial que seamos consientes de cómo debemos llevar una vida sana y equilibrar nuestras responsabilidades con nuestro derecho a una vida de calidad para nosotros y nuestras familias.
Bibliografía
López Roseífi Daniel. Estrés, como entenderlo, entenderse y vencerlo. Documento sin editorial. 2003
Pulití Afilio Raúl. El Manejo del Estrés. Documento sin editorial. 2003
Gastón de Mézerville. Ejes de Salud Mental. Edición Preliminar, Universidad de Costa Rica. 2001
Gutiérrez Lanzas Ledia. Técnicas para el manejo del estrés. Miami 2001
Woolfolk, Anita. 1996 Psicología Educativa. 6ta.ed. Prentice may
Hispanoamericana, S.A. México
domingo, 19 de septiembre de 2010
PREGUNTAS FRECUENTES QUE SE HACEN LOS PADRES
En esta sección se irán incluyendo las respuestas a las preguntas más frecuentes que se hacen los padres
¿Cómo ayudar al niño que ha perdido a los padres?
Su actitud hacia el niño, ¿es demasiado agresiva?
¿Qué hacer con un niño mayor de 6 años que duerme siempre en la cama con los padres?
¿Cómo actuar con las rabietas del niño de 2 años?
Mi hija tenía asumido el control del pipí y desde hace unos días se vuelve a hacer pis encima, ¿qué puedo hacer?
Mi hijo llora a menudo, ¿debo dejarle llorar?
¿Es normal que mi hijo se masturbe?
¿Influye la televisión sobre mi hijo? ¿De qué manera?
¿Es bueno que el niño vaya a la guardería?
Me voy a casar con la madre de una niña. Ellas no fueron muy bien tratadas por su verdadero padre ¿Qué debemos hacer?
Mi hija de 2 años y 4 meses reacciona agresivamente por el menor motivo y padece de constantes infecciones de oído, ¿qué me recomiendan?
Mi hija sufre pesadillas o terrores nocturnos, ¿qué puedo hacer?
Las respuestas que se presentan son muy genéricas y solo a título orientativo. Ante cada caso particular deberían estudiarse las causas del problema y establecer las acciones o terapias adecuadas.
¿Cómo ayudar al niño que ha perdido a los padres?
Intentar demostrarle con besos, caricias y palabras que es muy querido por las personas que le rodean. Es muy importante arroparlo mucho afectivamente, e ir favoreciendo que el niño exprese lo que le pasa, que lo pueda hablar con alguna persona cercana a él (con la que él se sienta más próximo), que llore si necesita llorar y que cuando lo haga encuentre siempre el consuelo en palabras y afecto de alguien cercano. De esta forma, y poco a poco, debería poder ir elaborando todas las cosas que le han ocurrido y que, probablemente, le han desestabilizado el ánimo y la seguridad afectiva.
Si ven que la tristeza del niño/ña se prolonga demasiado no duden en la conveniencia de consultar a un especialista infantil.
Su actitud hacia el niño ¿es demasiado agresiva?
Procure no utilizar maneras agresivas con el niño, pues esto solo puede empeorar su conducta, perjudicar la relación de éste con usted y favorecer que, a su vez, su hijo aprenda a utilizar la agresividad como forma de imposición.
Procure estar bien consigo mismo: intente relajarse, hacer algún deporte o pregúntese de qué manera puede usted desahogar el estado nervioso y de sobrecarga que le causa ese estado. Sintiéndose usted mejor, podrá atender mejor a su hijo.
¿Qué hacer con un niño mayor de 6 años que duerme siempre en la cama con los padres?
Con un niño de esta edad se puede razonar perfectamente sobre la incorrección del hábito que ha adquirido, así como establecerle límites a todo esto.
Empiecen desde el principio, como si tuviesen que enseñar a un niño pequeño a dormir en su propia cama. Cuando llegue el momento de ir a dormir, acuéstenlo (si quieren y como paso intermedio, léanle un cuento o dénle un muñeco para dormir) y adviértanle que, bajo ningún concepto, van a consentir que se levante a media noche de su cama para ir a la suya. Si no obedece, cada vez que se levante para ir hacia la cama de Vds., devuélvanla a la suya. No cedan, si no estarán de nuevo perdidos. Así tantas veces como sea necesario.
Si lo consigue, felicítenle de alguna manera, con algo que a él le agrade.
Será duro al principio, pues probablemente les costará varios paseos para devolverle a su cama, pero el esfuerzo valdrá la pena. Sobre todo, no cedan ni una sola noche más.
Si lo logran, tanto Vds. como él descansarán mucho mejor.
Si su hijo es muy movido, favorezca que realice actividades de movimiento: llévelo al parque o a lugares amplios y abiertos donde pueda desahogarse sin limitaciones.
Intente cambiar su actitud respecto al niño, procurando ser más tolerante. Cuando le sobrevenga el enfado hacia él, procure respirar hondo, contar hasta 3, y pensar cómo va a proceder ante esa conducta.
¿Cómo actuar con las rabietas del niño de 2 años?
En el niño de 2 años son típicas las rabietas, de mayor o menor intensidad, según el carácter del niño. Con ellas, el niño intenta medir los límites de los adultos ( hasta dónde pueden aguantar), los propios (hasta cuánto puede conseguir mediante esa actitud) ,..., pero quizás, si la intensidad de la rabieta es muy fuerte, llega un punto de descontrol tal, que al niño le resulta difícil volver a serenarse.
Es una fase "normal" en la evolución del niño, al igual que la etapa del "no",..., pero por ello debe intentarse que no se agrave en intensidad ni se alargue en el tiempo. El niño ha de comprobar que con esa actitud no consigue lo que pretende.
En la medida en que no pueda hacerse daño a sí mismo o a los demás, lo mejor, ante una rabieta de este tipo, es mantener la calma (en la medida de lo posible), mostrarse impasibles (ni siquiera enfado) ante "el show" y esperar a que pase. Cuando esto se repita varias veces, el niño terminará por anular esta actitud, ya que no le será "útil", y las cosas o conductas inútiles tienden a desaparecer.
Por el contrario, cuando el niño esté calmado, dénle toda la atención que requiera. Sobre todo, procuren no pegarle, pues eso sólo despertaría en él más rebeldía y rabia, y sería un modelo más que tendría a seguir, de comportarse agresivamente para poder dominar algo o alguien.
Mi hija tenía asumido el control del pipí y desde hace unos días se vuelve a hacer pis encima, ¿qué puedo hacer?
Probablemente, algo debe haber ocurrido en estos días (en casa, en la escuela,...) que le ha provocado a la niña este descontrol del pipí que ya tenía asumido. Intenten averiguar de qué se trata e intenten hablar con ella sobre esto, que probablemente debe preocuparla, auqnue quizás no lo demuestre.
No la riñan ni amenacen; podríamos estar haciendo de un pequeño descontrol un problema más agravado, tampoco alteren sus costumbres en el hábito del sueño: no duerman con ella. Piensen que, de todo ello, la niña podría estar sacando un beneficio secundario, que después no le interese perder y eso alargue su problema.
Procure que la niña no beba demasiados líquidos antes de acostarse y que transcurra un rato lo suficientemente amplio desde la cena hasta que la acueste.
Deje pasar unos días sin hacer demasiado caso de los escapes, ni hable de ellos; intente quitarles importancia, para disminuir la angustia que debe sentir la niña cada vez que ve lo que le pasa. Y, sobre todo, la primera noche que consiga volver a controlar el pipí, prémiela con algo que ella desee, muéstrele alegría y satisfacción por lo logrado.
Si, pese a esto, este descontrol no remite en unas semanas, no duden en consultar con un psicólogo infantil que pueda profundizar más en las causas que pueden estar provocando este pequeño descontrol nocturno.
Mi hijo llora a menudo, ¿debo dejarle llorar?
En lo que se refiere al hecho de dejar llorar a un niño, desde el punto de vista psicológico no se aconseja hacerlo, pues aunque aparentemente sus necesidades "fisiológicas" estén cubiertas y no sufra "aparentemente" riesgo físico alguno, puede estar demandando cubrir necesidades de otro tipo. Me refiero a las necesidades afectivas: de contacto, de sentirse atendido, querido, protegido,... Un abrazo o una demostración de cariño en ese momento, o la dedicación de un tiempo a atender esa demanda puede evitar que esos lloros acaben convirtiéndose en una demanda crónica.
Si dudan del estado emocional de su hijo, no duden en acudir a un psicólogo infantil, pues mediante la observación del niño y de su juego, y quizás de alguna otra prueba proyectiva, podrá valorarlo y ustedes quedarán tranquilos.
¿Es normal que mi hijo se masturbe?
La sexualidad en el niño está presente desde los primeros momentos, desde que va descubriendo el propio cuerpo mediante la autoexploración, es decir, desde que es un bebé.
Si al explorar esta zona, la de los genitales, descubre placer, es normal que persista en esta actividad. Es un hecho normal a cualquier edad, no es malo, sólo se convierte en problema cuando se hace de forma excesiva o en público. Todo ello es resultado del interés por el propio cuerpo.
Para mantener esta actividad "controlada" y que no vaya a más convirtiéndose en una verdadera preocupación, hay que intentar no reaccionar excesivamente cuando se encuentre al niño en esta situación y distraer su atención hacia otra actividad.
La masturbación si ocurre sólo despúes de las rabietas, puede obedecer a una descarga de las tensiones acumuladas.
¿Influye la televisión sobre mi hijo? ¿De qué manera?
El impacto que la TV tiene sobre los niños es evidente, entre
otras cosas porque en todas las casas hay por lo menos un televisor, y no hay niño que escape a su influencia.
Los niños ven muchas horas de televisión y la mayoría de éstas están sobrecargadas de violencia; además, la información visual causa gran impacto en la mente, y más en la de los niños. El niño, al presenciar tal bombardeo de violencia, queda influido de determinadas maneras:
- favorece en él una desensibilización hacia la violencia, se familiariza y acostumbra a ver como normal, determinado nivel de agresiones.
- corre el riesgo de identificarse con el héroe o provocador, sea cual sea éticamente su conducta.
- según la edad del niño y el nº de horas de impacto televisivo a que esté sometido, puede llegar a confundir la realidad con la ficción , con el riesgo que esto comporta.
Todo esto queda potenciado, si el niño no mantiene una relación "de calidad" con su familia, amigos,... que compense estos impactos.
No hay duda; numerosos estudios han demostrado la clara relación existente entre la violencia en TV y los comportamientos agresivos en los niños.
Está en manos de los padres, proteger a sus hijos de todo esto seleccionando la programación que éstos ven, así como limitando el nº de horas que pasan frente al televisor. Y, sobre todo, los propios padres han de predicar con el ejemplo.
¿Es bueno que el niño vaya a la guardería?
Tengo un nietecito de 10 meses y desde los tres meses lo he cuidado yo,desde las 8 de la mañana hasta las 2 de la tarde y luego su otra abuela desde las 16 horas hasta las 19 horas (todavia somos abuelas jovenes,pues tenemos 49 y 52 años).Esto ha sido así porque los padres del niño trabajan. Ahora han querido llevar al bebé a una guardería, desde luego es buena, pero solo por las mañanas y por las tardes lo seguimos cuidando las dos abuelas,turnándonos los dias.
El niño en una semana ha adelgazado 400grs.y ahora cuando ve que alguien extraño le acaricia se pone a llorar, cuando antes era un niño que se reia si alguien le decia algo.Yo no sé que pensar y estoy muy preocupada por el bebé. En casa es feliz y se ríe mucho.Por favor decirme algo pues me siento muy mal y pienso si puede ser por llevarlo a la guardería.
Muchas gracias.
Respuesta:
Antes que nada agradecer su confianza en visitar y consultar sus dudas a través de nuestra página web.Y disculpen la demora de la respuesta, pero son muchas las consultas diarias recibidas, y ello dificulta la fluidez en las respuestas.
Parece, por lo que me cuentan, que su nieto está en pleno proceso de adaptación, necesario ante cualquier cambio; en principio, cuanto más pequeño es el niño, más le costará adaptarse a una situación para la que no está preparado. No hay una edad "ideal" para empezar a ir a la guardería; las necesidades laborales son las que la imponen. Pero considero que, siempre que el niño pueda estar al cuidado de un adulto de confianza, es algo preferible a su asistencia en guardería. ¿Por qué? El motivo es muy simple: las necesidades (de todo tipo) que tiene un niño de menos de 3 años, difícilmente pueden cubrirse con otros 13 o 14 niños (pues actualmente, los grupos de niños suelen ser sobre esta proporción, por cuidadora). Y si no, pregúntense por qué la escolaridad obligatoria empieza a los 3 años y no antes.
De todas maneras, no siempre los padres pueden disponer de una persona que atienda a su hijo, durante las largas horas de la jornada laboral. En ese caso, la edad de ingreso más adecuada es la de los dos años, pues el niño cuenta ya con importantes avances en el lenguaje (con lo cual puede pedir y expresar algo más lo que le pasa) y en la psicomotricidad (se mueva con más seguridad).
Sólo decirles que no se angustien, y hablen todo lo que haga falta con la cuidadora del niño.
Me voy a casar con la madre de una niña. Ellas no fueron muy bien tratadas por su verdadero padre ¿Qué debemos hacer?
El motivo de la consulta es el siguiente, me voy a unir en matrimonio con la madre de la niña, y lo que sucede es que sabemos que ella sentirá rechazo a esto y se pondrá rebelde. La niña está muy afectada, y también su madre por la vida que llevaron junto al padre de la niña. La niña no era muy bien tratada por él, incluso ni su madre fueron muy bien tratadas, es por eso que están afectadas, y a pesar de esto, sabemos que la niña extrañará a su padre, porque desde luego es su padre y siempre lo será, pero como ya le mencioné, están muy afectadas y quizás eso haga que todo esto sea más difícil para mí y para su mamá. Así que les pido un consejo sobre qué hacer.
Respuesta:
En realidad se encuentran ante una situación delicada, pues el daño recibido cuesta mucho de reparar y todavía más cuando se trata de un niño, pues todo queda grabado con más fuerza. Yo les aconsejaría que consultasen a un psicólogo de su población, para que valorase en profundidad la situación emocional en que se encuentra tanto la niña como la madre, valorar el hecho de si va a seguir viendo o no a su padre, en qué condiciones, pautas para que Vd. vaya siendo aceptado por ella,... No es una situación sencilla.
Mientras tanto hablen con ella todo lo que puedan, permitan que a su vez ella comunique todo lo que piensa y siente al respecto aunque demuestre rabia o enfado y, sobre todo, demuéstrenle mucho amor, pues lo que más teme un niño quedarse al desamparo de que nadie le quiera ni le importe.
Mi hija de 2 años y 4 meses reacciona agresivamente por el menor motivo y padece de constantes infecciones de oído, ¿qué me recomiendan?
Mi hija es la segunda de 3 hermanitas, convive con los padres, abuelos, primos y tíos. Su carácter es muy fuerte, no le gusta convivir mucho con otros niños (excepto sus primos), y creo que ya no es normal su comportamiento, ya no es una simple rabieta o pataleta, sino que ya reacciona mas agresivamente por el menor motivo y no entiende si le hablamos, la llevamos a otro lugar, con unas nalgadas, etc., ya lo hemos intentado todo pero sigue igual. Sufre de problemas del oído (frecuentes y dolorosas infecciones) pero no sé si sería necesario llevarla al psicologo infantil, ¿qué me recomiendan?
Respuesta:
Con los datos que me aporta y teniendo en cuenta la corta edad de la niña, considero que la dolencia física que padece (las frecuentes infecciones de oído) están jugando un papel importante en todo esto. Puede que esa molestia, tan repetitiva y dolorosa, esté influyendo en su carácter, haciéndolo más irritable e irascible. Es pequeñita aún, y Vd. me cuenta que de las dos hermanas que tiene, una de ellas es aún más pequeñita que la niña en cuestión: puede que no esté llevando nada bien este tema. Habría que conocer con más detalle todo el historial de la niña, desde el embarazo para poder precisar si esta puede ser también una causa que se añade a la problemática de la niña.
También me indica que conviven con ella un alto número de personas (abuela, tíos, primos, hermanas, padres): probablemente demasiado movimiento alrededor de una niña con molestias de oído, que sigue siendo pequeña pero que ya no es la más pequeña de la casa. Intenten ser tolerantes con ella, pero sin sucumbir a sus rabietas. Cuando las haga, no consientan en lo que la niña pretende conseguir en ese momento, pero tampoco le peguen ni se enfurezcan con ella; esperen con calma, en la medida de lo posible, a que termine "su rabieta" y luego, sobre todo, no cedan.
Cuando ella observe que con esa actitud no consigue lo que quiere, terminará por desaparecer su conducta. Si ven que persiste esta irritabilidad y agresividad de la niña, no duden en acudir a un psicólogo infantil, que les orientará debidamente. Pero antes que nada, hagan (que supongo que ya viene siendo así) por solucionar su problema de oídos.
Mi hija sufre pesadillas o terrores nocturnos, ¿qué puedo hacer?
Mi niña de 4 años 9 meses esta sufriendo de pesadillas o terrores nocturnos, que no sé como manejar. Despierta en sollozos a la medianoche o de madrugada y cuando me acerco a su cama me dice que me vaya y si no me voy de su dormitorio, ella se sale y se va a la sala pero todo esto lo hace llorando y como renegando, despues de un rato que la dejo tranquila pero observándola, se pone a llorar y me llama para que la calme y la abraze. He estado leyendo sobre los terrores nocturnos y no sé a que pueda deberse.
Creo que debo comentarle que por motivos de mi trabajo salgo temprano de mi casa con mis dos niños y la empleada a la casa de mi madre, ahí se quedan mi niño de 2 años y la empleada, pues mi hijita se va a la escuela, pero cuando ella sale de la escuelita se va a la casa de mi hermana que está enfrente de la casa de mi madre. A veces creo que son estas cosas las que le crean estas pesadillas a mi hijita. El problema es que mi niña no puede quedarse con su hermano en la casa de mi madre, porque mi niña es muy caprichosa y mi hermana la ha acostumbrado a hacer su voluntad, eso hace que sea dificil que se quede con su hermanito. Ademas, mi niña tiene rabietas cuando no hacemos lo que ella quiere como por ejemplo que se le compren golosinas a la hora que ella quiere.
Les agradezco me den una orientacion para tratar las pesadillas y las rabietas de mi hija.
Respuesta:
¿Ha probado de hablar con ella, al día siguiente, sobre lo ocurrido durante la noche? Inténtelo. Si no recuerda nada, estaríamos hablando de terrores nocturnos; por el contrario, se trataría de pesadillas.
Si se tratase de terrores nocturnos, Uds. ya proceden de la forma correcta, pues no se puede hacer más que esperar a que pase "la crisis", abrazándola para que se tranquilice y se sienta protegida.
Revise si la niña, durante el día o poco antes de acostarse, está sometida a demasiada excitación que podrían desencadenar en ella estos miedos; o si ve escenas violentas en TV,.. Las pesadillas, sin embargo, son habituales en los niños de 3 a 6 años. El proceder sería el mismo. Si en un tiempo prudencial, esto sigue repitiéndose acuda a su pediatra para que descarte cualquier otra alteración de tipo físico.
¿Cómo ayudar al niño que ha perdido a los padres?
Su actitud hacia el niño, ¿es demasiado agresiva?
¿Qué hacer con un niño mayor de 6 años que duerme siempre en la cama con los padres?
¿Cómo actuar con las rabietas del niño de 2 años?
Mi hija tenía asumido el control del pipí y desde hace unos días se vuelve a hacer pis encima, ¿qué puedo hacer?
Mi hijo llora a menudo, ¿debo dejarle llorar?
¿Es normal que mi hijo se masturbe?
¿Influye la televisión sobre mi hijo? ¿De qué manera?
¿Es bueno que el niño vaya a la guardería?
Me voy a casar con la madre de una niña. Ellas no fueron muy bien tratadas por su verdadero padre ¿Qué debemos hacer?
Mi hija de 2 años y 4 meses reacciona agresivamente por el menor motivo y padece de constantes infecciones de oído, ¿qué me recomiendan?
Mi hija sufre pesadillas o terrores nocturnos, ¿qué puedo hacer?
Las respuestas que se presentan son muy genéricas y solo a título orientativo. Ante cada caso particular deberían estudiarse las causas del problema y establecer las acciones o terapias adecuadas.
¿Cómo ayudar al niño que ha perdido a los padres?
Intentar demostrarle con besos, caricias y palabras que es muy querido por las personas que le rodean. Es muy importante arroparlo mucho afectivamente, e ir favoreciendo que el niño exprese lo que le pasa, que lo pueda hablar con alguna persona cercana a él (con la que él se sienta más próximo), que llore si necesita llorar y que cuando lo haga encuentre siempre el consuelo en palabras y afecto de alguien cercano. De esta forma, y poco a poco, debería poder ir elaborando todas las cosas que le han ocurrido y que, probablemente, le han desestabilizado el ánimo y la seguridad afectiva.
Si ven que la tristeza del niño/ña se prolonga demasiado no duden en la conveniencia de consultar a un especialista infantil.
Su actitud hacia el niño ¿es demasiado agresiva?
Procure no utilizar maneras agresivas con el niño, pues esto solo puede empeorar su conducta, perjudicar la relación de éste con usted y favorecer que, a su vez, su hijo aprenda a utilizar la agresividad como forma de imposición.
Procure estar bien consigo mismo: intente relajarse, hacer algún deporte o pregúntese de qué manera puede usted desahogar el estado nervioso y de sobrecarga que le causa ese estado. Sintiéndose usted mejor, podrá atender mejor a su hijo.
¿Qué hacer con un niño mayor de 6 años que duerme siempre en la cama con los padres?
Con un niño de esta edad se puede razonar perfectamente sobre la incorrección del hábito que ha adquirido, así como establecerle límites a todo esto.
Empiecen desde el principio, como si tuviesen que enseñar a un niño pequeño a dormir en su propia cama. Cuando llegue el momento de ir a dormir, acuéstenlo (si quieren y como paso intermedio, léanle un cuento o dénle un muñeco para dormir) y adviértanle que, bajo ningún concepto, van a consentir que se levante a media noche de su cama para ir a la suya. Si no obedece, cada vez que se levante para ir hacia la cama de Vds., devuélvanla a la suya. No cedan, si no estarán de nuevo perdidos. Así tantas veces como sea necesario.
Si lo consigue, felicítenle de alguna manera, con algo que a él le agrade.
Será duro al principio, pues probablemente les costará varios paseos para devolverle a su cama, pero el esfuerzo valdrá la pena. Sobre todo, no cedan ni una sola noche más.
Si lo logran, tanto Vds. como él descansarán mucho mejor.
Si su hijo es muy movido, favorezca que realice actividades de movimiento: llévelo al parque o a lugares amplios y abiertos donde pueda desahogarse sin limitaciones.
Intente cambiar su actitud respecto al niño, procurando ser más tolerante. Cuando le sobrevenga el enfado hacia él, procure respirar hondo, contar hasta 3, y pensar cómo va a proceder ante esa conducta.
¿Cómo actuar con las rabietas del niño de 2 años?
En el niño de 2 años son típicas las rabietas, de mayor o menor intensidad, según el carácter del niño. Con ellas, el niño intenta medir los límites de los adultos ( hasta dónde pueden aguantar), los propios (hasta cuánto puede conseguir mediante esa actitud) ,..., pero quizás, si la intensidad de la rabieta es muy fuerte, llega un punto de descontrol tal, que al niño le resulta difícil volver a serenarse.
Es una fase "normal" en la evolución del niño, al igual que la etapa del "no",..., pero por ello debe intentarse que no se agrave en intensidad ni se alargue en el tiempo. El niño ha de comprobar que con esa actitud no consigue lo que pretende.
En la medida en que no pueda hacerse daño a sí mismo o a los demás, lo mejor, ante una rabieta de este tipo, es mantener la calma (en la medida de lo posible), mostrarse impasibles (ni siquiera enfado) ante "el show" y esperar a que pase. Cuando esto se repita varias veces, el niño terminará por anular esta actitud, ya que no le será "útil", y las cosas o conductas inútiles tienden a desaparecer.
Por el contrario, cuando el niño esté calmado, dénle toda la atención que requiera. Sobre todo, procuren no pegarle, pues eso sólo despertaría en él más rebeldía y rabia, y sería un modelo más que tendría a seguir, de comportarse agresivamente para poder dominar algo o alguien.
Mi hija tenía asumido el control del pipí y desde hace unos días se vuelve a hacer pis encima, ¿qué puedo hacer?
Probablemente, algo debe haber ocurrido en estos días (en casa, en la escuela,...) que le ha provocado a la niña este descontrol del pipí que ya tenía asumido. Intenten averiguar de qué se trata e intenten hablar con ella sobre esto, que probablemente debe preocuparla, auqnue quizás no lo demuestre.
No la riñan ni amenacen; podríamos estar haciendo de un pequeño descontrol un problema más agravado, tampoco alteren sus costumbres en el hábito del sueño: no duerman con ella. Piensen que, de todo ello, la niña podría estar sacando un beneficio secundario, que después no le interese perder y eso alargue su problema.
Procure que la niña no beba demasiados líquidos antes de acostarse y que transcurra un rato lo suficientemente amplio desde la cena hasta que la acueste.
Deje pasar unos días sin hacer demasiado caso de los escapes, ni hable de ellos; intente quitarles importancia, para disminuir la angustia que debe sentir la niña cada vez que ve lo que le pasa. Y, sobre todo, la primera noche que consiga volver a controlar el pipí, prémiela con algo que ella desee, muéstrele alegría y satisfacción por lo logrado.
Si, pese a esto, este descontrol no remite en unas semanas, no duden en consultar con un psicólogo infantil que pueda profundizar más en las causas que pueden estar provocando este pequeño descontrol nocturno.
Mi hijo llora a menudo, ¿debo dejarle llorar?
En lo que se refiere al hecho de dejar llorar a un niño, desde el punto de vista psicológico no se aconseja hacerlo, pues aunque aparentemente sus necesidades "fisiológicas" estén cubiertas y no sufra "aparentemente" riesgo físico alguno, puede estar demandando cubrir necesidades de otro tipo. Me refiero a las necesidades afectivas: de contacto, de sentirse atendido, querido, protegido,... Un abrazo o una demostración de cariño en ese momento, o la dedicación de un tiempo a atender esa demanda puede evitar que esos lloros acaben convirtiéndose en una demanda crónica.
Si dudan del estado emocional de su hijo, no duden en acudir a un psicólogo infantil, pues mediante la observación del niño y de su juego, y quizás de alguna otra prueba proyectiva, podrá valorarlo y ustedes quedarán tranquilos.
¿Es normal que mi hijo se masturbe?
La sexualidad en el niño está presente desde los primeros momentos, desde que va descubriendo el propio cuerpo mediante la autoexploración, es decir, desde que es un bebé.
Si al explorar esta zona, la de los genitales, descubre placer, es normal que persista en esta actividad. Es un hecho normal a cualquier edad, no es malo, sólo se convierte en problema cuando se hace de forma excesiva o en público. Todo ello es resultado del interés por el propio cuerpo.
Para mantener esta actividad "controlada" y que no vaya a más convirtiéndose en una verdadera preocupación, hay que intentar no reaccionar excesivamente cuando se encuentre al niño en esta situación y distraer su atención hacia otra actividad.
La masturbación si ocurre sólo despúes de las rabietas, puede obedecer a una descarga de las tensiones acumuladas.
¿Influye la televisión sobre mi hijo? ¿De qué manera?
El impacto que la TV tiene sobre los niños es evidente, entre
otras cosas porque en todas las casas hay por lo menos un televisor, y no hay niño que escape a su influencia.
Los niños ven muchas horas de televisión y la mayoría de éstas están sobrecargadas de violencia; además, la información visual causa gran impacto en la mente, y más en la de los niños. El niño, al presenciar tal bombardeo de violencia, queda influido de determinadas maneras:
- favorece en él una desensibilización hacia la violencia, se familiariza y acostumbra a ver como normal, determinado nivel de agresiones.
- corre el riesgo de identificarse con el héroe o provocador, sea cual sea éticamente su conducta.
- según la edad del niño y el nº de horas de impacto televisivo a que esté sometido, puede llegar a confundir la realidad con la ficción , con el riesgo que esto comporta.
Todo esto queda potenciado, si el niño no mantiene una relación "de calidad" con su familia, amigos,... que compense estos impactos.
No hay duda; numerosos estudios han demostrado la clara relación existente entre la violencia en TV y los comportamientos agresivos en los niños.
Está en manos de los padres, proteger a sus hijos de todo esto seleccionando la programación que éstos ven, así como limitando el nº de horas que pasan frente al televisor. Y, sobre todo, los propios padres han de predicar con el ejemplo.
¿Es bueno que el niño vaya a la guardería?
Tengo un nietecito de 10 meses y desde los tres meses lo he cuidado yo,desde las 8 de la mañana hasta las 2 de la tarde y luego su otra abuela desde las 16 horas hasta las 19 horas (todavia somos abuelas jovenes,pues tenemos 49 y 52 años).Esto ha sido así porque los padres del niño trabajan. Ahora han querido llevar al bebé a una guardería, desde luego es buena, pero solo por las mañanas y por las tardes lo seguimos cuidando las dos abuelas,turnándonos los dias.
El niño en una semana ha adelgazado 400grs.y ahora cuando ve que alguien extraño le acaricia se pone a llorar, cuando antes era un niño que se reia si alguien le decia algo.Yo no sé que pensar y estoy muy preocupada por el bebé. En casa es feliz y se ríe mucho.Por favor decirme algo pues me siento muy mal y pienso si puede ser por llevarlo a la guardería.
Muchas gracias.
Respuesta:
Antes que nada agradecer su confianza en visitar y consultar sus dudas a través de nuestra página web.Y disculpen la demora de la respuesta, pero son muchas las consultas diarias recibidas, y ello dificulta la fluidez en las respuestas.
Parece, por lo que me cuentan, que su nieto está en pleno proceso de adaptación, necesario ante cualquier cambio; en principio, cuanto más pequeño es el niño, más le costará adaptarse a una situación para la que no está preparado. No hay una edad "ideal" para empezar a ir a la guardería; las necesidades laborales son las que la imponen. Pero considero que, siempre que el niño pueda estar al cuidado de un adulto de confianza, es algo preferible a su asistencia en guardería. ¿Por qué? El motivo es muy simple: las necesidades (de todo tipo) que tiene un niño de menos de 3 años, difícilmente pueden cubrirse con otros 13 o 14 niños (pues actualmente, los grupos de niños suelen ser sobre esta proporción, por cuidadora). Y si no, pregúntense por qué la escolaridad obligatoria empieza a los 3 años y no antes.
De todas maneras, no siempre los padres pueden disponer de una persona que atienda a su hijo, durante las largas horas de la jornada laboral. En ese caso, la edad de ingreso más adecuada es la de los dos años, pues el niño cuenta ya con importantes avances en el lenguaje (con lo cual puede pedir y expresar algo más lo que le pasa) y en la psicomotricidad (se mueva con más seguridad).
Sólo decirles que no se angustien, y hablen todo lo que haga falta con la cuidadora del niño.
Me voy a casar con la madre de una niña. Ellas no fueron muy bien tratadas por su verdadero padre ¿Qué debemos hacer?
El motivo de la consulta es el siguiente, me voy a unir en matrimonio con la madre de la niña, y lo que sucede es que sabemos que ella sentirá rechazo a esto y se pondrá rebelde. La niña está muy afectada, y también su madre por la vida que llevaron junto al padre de la niña. La niña no era muy bien tratada por él, incluso ni su madre fueron muy bien tratadas, es por eso que están afectadas, y a pesar de esto, sabemos que la niña extrañará a su padre, porque desde luego es su padre y siempre lo será, pero como ya le mencioné, están muy afectadas y quizás eso haga que todo esto sea más difícil para mí y para su mamá. Así que les pido un consejo sobre qué hacer.
Respuesta:
En realidad se encuentran ante una situación delicada, pues el daño recibido cuesta mucho de reparar y todavía más cuando se trata de un niño, pues todo queda grabado con más fuerza. Yo les aconsejaría que consultasen a un psicólogo de su población, para que valorase en profundidad la situación emocional en que se encuentra tanto la niña como la madre, valorar el hecho de si va a seguir viendo o no a su padre, en qué condiciones, pautas para que Vd. vaya siendo aceptado por ella,... No es una situación sencilla.
Mientras tanto hablen con ella todo lo que puedan, permitan que a su vez ella comunique todo lo que piensa y siente al respecto aunque demuestre rabia o enfado y, sobre todo, demuéstrenle mucho amor, pues lo que más teme un niño quedarse al desamparo de que nadie le quiera ni le importe.
Mi hija de 2 años y 4 meses reacciona agresivamente por el menor motivo y padece de constantes infecciones de oído, ¿qué me recomiendan?
Mi hija es la segunda de 3 hermanitas, convive con los padres, abuelos, primos y tíos. Su carácter es muy fuerte, no le gusta convivir mucho con otros niños (excepto sus primos), y creo que ya no es normal su comportamiento, ya no es una simple rabieta o pataleta, sino que ya reacciona mas agresivamente por el menor motivo y no entiende si le hablamos, la llevamos a otro lugar, con unas nalgadas, etc., ya lo hemos intentado todo pero sigue igual. Sufre de problemas del oído (frecuentes y dolorosas infecciones) pero no sé si sería necesario llevarla al psicologo infantil, ¿qué me recomiendan?
Respuesta:
Con los datos que me aporta y teniendo en cuenta la corta edad de la niña, considero que la dolencia física que padece (las frecuentes infecciones de oído) están jugando un papel importante en todo esto. Puede que esa molestia, tan repetitiva y dolorosa, esté influyendo en su carácter, haciéndolo más irritable e irascible. Es pequeñita aún, y Vd. me cuenta que de las dos hermanas que tiene, una de ellas es aún más pequeñita que la niña en cuestión: puede que no esté llevando nada bien este tema. Habría que conocer con más detalle todo el historial de la niña, desde el embarazo para poder precisar si esta puede ser también una causa que se añade a la problemática de la niña.
También me indica que conviven con ella un alto número de personas (abuela, tíos, primos, hermanas, padres): probablemente demasiado movimiento alrededor de una niña con molestias de oído, que sigue siendo pequeña pero que ya no es la más pequeña de la casa. Intenten ser tolerantes con ella, pero sin sucumbir a sus rabietas. Cuando las haga, no consientan en lo que la niña pretende conseguir en ese momento, pero tampoco le peguen ni se enfurezcan con ella; esperen con calma, en la medida de lo posible, a que termine "su rabieta" y luego, sobre todo, no cedan.
Cuando ella observe que con esa actitud no consigue lo que quiere, terminará por desaparecer su conducta. Si ven que persiste esta irritabilidad y agresividad de la niña, no duden en acudir a un psicólogo infantil, que les orientará debidamente. Pero antes que nada, hagan (que supongo que ya viene siendo así) por solucionar su problema de oídos.
Mi hija sufre pesadillas o terrores nocturnos, ¿qué puedo hacer?
Mi niña de 4 años 9 meses esta sufriendo de pesadillas o terrores nocturnos, que no sé como manejar. Despierta en sollozos a la medianoche o de madrugada y cuando me acerco a su cama me dice que me vaya y si no me voy de su dormitorio, ella se sale y se va a la sala pero todo esto lo hace llorando y como renegando, despues de un rato que la dejo tranquila pero observándola, se pone a llorar y me llama para que la calme y la abraze. He estado leyendo sobre los terrores nocturnos y no sé a que pueda deberse.
Creo que debo comentarle que por motivos de mi trabajo salgo temprano de mi casa con mis dos niños y la empleada a la casa de mi madre, ahí se quedan mi niño de 2 años y la empleada, pues mi hijita se va a la escuela, pero cuando ella sale de la escuelita se va a la casa de mi hermana que está enfrente de la casa de mi madre. A veces creo que son estas cosas las que le crean estas pesadillas a mi hijita. El problema es que mi niña no puede quedarse con su hermano en la casa de mi madre, porque mi niña es muy caprichosa y mi hermana la ha acostumbrado a hacer su voluntad, eso hace que sea dificil que se quede con su hermanito. Ademas, mi niña tiene rabietas cuando no hacemos lo que ella quiere como por ejemplo que se le compren golosinas a la hora que ella quiere.
Les agradezco me den una orientacion para tratar las pesadillas y las rabietas de mi hija.
Respuesta:
¿Ha probado de hablar con ella, al día siguiente, sobre lo ocurrido durante la noche? Inténtelo. Si no recuerda nada, estaríamos hablando de terrores nocturnos; por el contrario, se trataría de pesadillas.
Si se tratase de terrores nocturnos, Uds. ya proceden de la forma correcta, pues no se puede hacer más que esperar a que pase "la crisis", abrazándola para que se tranquilice y se sienta protegida.
Revise si la niña, durante el día o poco antes de acostarse, está sometida a demasiada excitación que podrían desencadenar en ella estos miedos; o si ve escenas violentas en TV,.. Las pesadillas, sin embargo, son habituales en los niños de 3 a 6 años. El proceder sería el mismo. Si en un tiempo prudencial, esto sigue repitiéndose acuda a su pediatra para que descarte cualquier otra alteración de tipo físico.
PADRES SEPARADOS
Dado el elevado número de separaciones entre parejas que se producen hoy en día, son muchos los niños afectados por esta situación. Esta situación ha dejado de ser excepcional para pasar a ser bastante habitual.
Además del shock emocional para los padres que supone una ruptura sentimental, éstos cargan con el miedo de cómo toda esa situación repercutirá en sus hijos.
Las consecuencias que sufre el hijo de padres separados estará más relacionado:
- con las desaveniencias familiares previas y asociadas a la separación
- y con el papel que hacen jugar al niño en la separación más que con la propia separación.
Esto, junto con la edad y la madurez del propio niño condicionarán la forma cómo esta separación influirá en su desarrollo.
Veamos varios apartados:
Posibles reacciones en el niño
Como influye la edad y madurez del niño
Mensajes clave para recordar al niño
Mensajes clave para los padres
POSIBLES REACCIONES DEL NIÑO
- Reacción de ansiedad, e incluso angustia, durante el conflicto y tras la separación de los padres. Suelen sentir miedo.
- Lloran a menudo y esto les tranquiliza. Hay que acompañarles en ese momento, y favorecer esa expresión del dolor que sienten.
- Insisten una y otra vez en el deseo de que los padres vuelvan a estar juntos. Hasta que no aceptan que esto no es posible, se muestran muy tristes e infelices. Acabarán aceptando que esto no es más que una fantasía.
- Algunos se acuerdan del otro progenitor, cuando el que está con ellos les regaña; y desean tanto estar con el otro, que incluso pueden llegar a pensar en escaparse de casa. Llegan a idealizar más al otro progenitor, al ausente, pues sólo recuerda los buenos ratos pasados con éste.
- Probablemente, aparezcan trastornos en el sueño y en la alimentación
COMO INFLUYE LA EDAD Y MADUREZ DEL NIÑO
- Cuanto más pequeño es el niño, dispone de menos mecanismos para elaborar lo que está pasando. En consecuencia ,suelen aparecer manifestaciones de ello a través del cuerpo: molestias abdominales, vómitos, dolores de cabeza,...
- Cuando el niño es algo mayor puede sentirse la causa de dicha separación y, por tanto, sentir gran culpabilidad. Suelen aparecer depresiones con fases más agresivas, repercusiones en el rendimiento escolar, regresiones a edades anteriores (vuelven a surgir comportamientos anteriores, de más pequeños,...),...
- En niños ya más mayores, suele desarrollarse una hipermadurez en parte positiva, pero a la vez peligrosa que pretende sustituir al progenitor ausente.
MENSAJES CLAVES PARA RECORDAR AL NIÑO
- La decisión de separarse es exclusivamente de los padres. Ellos han tomado esta decisión porque creen que es lo mejor para todos los componentes de la familia. Los hijos no han tenido nada que ver en esta decisión.
- Los padres no se han separado porque el niño se haya portado mal, pues otras veces lo ha hecho y no ha ocurrido así.
- Resaltar al niño cuántas personas se preocupan por él (abuelos, amigos, profesores,...) y desean que sea feliz. Por tanto, ha de borrar ese miedo que siente a ser abandonado, a quedarse sólo. Cuenta con el cariño de más personas.
- Seguirá disponiendo de ambos padres, en todos los aspectos que él precise, aunque ya no vivan juntos.
- Siempre que le preocupe algo o se sienta mal, podrá hablar con los padres; ello le hará sentirse mejor.
- Aunque los padres se hayan separado, el niño puede igualmente amar y ser amado; no tiene por qué repetirse esa situación siempre.
- Los padres demuestran su amor de muy diversas maneras. Pero puedes sentir que tus padres te siguen queriendo si intentan estar contigo todo el tiempo que pueden, si te ayudan cuando lo necesitas y si te escuchan.
MENSAJES CLAVES PARA LOS PADRES
- No caer en la sobreprotección del hijo por pena; se le ha de seguir tratando como a un niño "normal" de su edad. Si no "no le ayudaremos a crecer", acabará comportándose de forma inmadura y más infantil de lo que le corresponde.
- Todas las personas tienen virtudes y defectos; también los padres. Hablar con el niño del otro progenitor con argumentos reales, sin caer en la ficción.
- Es preferible que, los días de encuentro, no se llenen excesivamente con actividades, pues si se ocupa el tiempo en hacer demasiadas cosas, no hay tiempo para charlar, comunicarse,...
- Los puntos más conflictivos de los padres tras la separación suelen ser: los hijos, el dinero y las nuevas relaciones. Intente ser objetivo y no intentar poner al hijo de su parte. Hay que intentar solucionar estas cuestiones, sin involucrar a los hijos.
- Es preferible para los niños, que vuelva a constituirse una familia compuesta por hombre y mujer, aunque uno de ellos no sea el verdadero progenitor; ello reparará los vínculos dañados, aunque requerirá tiempo la aceptación de esa nueva situación por parte de todos.
Además del shock emocional para los padres que supone una ruptura sentimental, éstos cargan con el miedo de cómo toda esa situación repercutirá en sus hijos.
Las consecuencias que sufre el hijo de padres separados estará más relacionado:
- con las desaveniencias familiares previas y asociadas a la separación
- y con el papel que hacen jugar al niño en la separación más que con la propia separación.
Esto, junto con la edad y la madurez del propio niño condicionarán la forma cómo esta separación influirá en su desarrollo.
Veamos varios apartados:
Posibles reacciones en el niño
Como influye la edad y madurez del niño
Mensajes clave para recordar al niño
Mensajes clave para los padres
POSIBLES REACCIONES DEL NIÑO
- Reacción de ansiedad, e incluso angustia, durante el conflicto y tras la separación de los padres. Suelen sentir miedo.
- Lloran a menudo y esto les tranquiliza. Hay que acompañarles en ese momento, y favorecer esa expresión del dolor que sienten.
- Insisten una y otra vez en el deseo de que los padres vuelvan a estar juntos. Hasta que no aceptan que esto no es posible, se muestran muy tristes e infelices. Acabarán aceptando que esto no es más que una fantasía.
- Algunos se acuerdan del otro progenitor, cuando el que está con ellos les regaña; y desean tanto estar con el otro, que incluso pueden llegar a pensar en escaparse de casa. Llegan a idealizar más al otro progenitor, al ausente, pues sólo recuerda los buenos ratos pasados con éste.
- Probablemente, aparezcan trastornos en el sueño y en la alimentación
COMO INFLUYE LA EDAD Y MADUREZ DEL NIÑO
- Cuanto más pequeño es el niño, dispone de menos mecanismos para elaborar lo que está pasando. En consecuencia ,suelen aparecer manifestaciones de ello a través del cuerpo: molestias abdominales, vómitos, dolores de cabeza,...
- Cuando el niño es algo mayor puede sentirse la causa de dicha separación y, por tanto, sentir gran culpabilidad. Suelen aparecer depresiones con fases más agresivas, repercusiones en el rendimiento escolar, regresiones a edades anteriores (vuelven a surgir comportamientos anteriores, de más pequeños,...),...
- En niños ya más mayores, suele desarrollarse una hipermadurez en parte positiva, pero a la vez peligrosa que pretende sustituir al progenitor ausente.
MENSAJES CLAVES PARA RECORDAR AL NIÑO
- La decisión de separarse es exclusivamente de los padres. Ellos han tomado esta decisión porque creen que es lo mejor para todos los componentes de la familia. Los hijos no han tenido nada que ver en esta decisión.
- Los padres no se han separado porque el niño se haya portado mal, pues otras veces lo ha hecho y no ha ocurrido así.
- Resaltar al niño cuántas personas se preocupan por él (abuelos, amigos, profesores,...) y desean que sea feliz. Por tanto, ha de borrar ese miedo que siente a ser abandonado, a quedarse sólo. Cuenta con el cariño de más personas.
- Seguirá disponiendo de ambos padres, en todos los aspectos que él precise, aunque ya no vivan juntos.
- Siempre que le preocupe algo o se sienta mal, podrá hablar con los padres; ello le hará sentirse mejor.
- Aunque los padres se hayan separado, el niño puede igualmente amar y ser amado; no tiene por qué repetirse esa situación siempre.
- Los padres demuestran su amor de muy diversas maneras. Pero puedes sentir que tus padres te siguen queriendo si intentan estar contigo todo el tiempo que pueden, si te ayudan cuando lo necesitas y si te escuchan.
MENSAJES CLAVES PARA LOS PADRES
- No caer en la sobreprotección del hijo por pena; se le ha de seguir tratando como a un niño "normal" de su edad. Si no "no le ayudaremos a crecer", acabará comportándose de forma inmadura y más infantil de lo que le corresponde.
- Todas las personas tienen virtudes y defectos; también los padres. Hablar con el niño del otro progenitor con argumentos reales, sin caer en la ficción.
- Es preferible que, los días de encuentro, no se llenen excesivamente con actividades, pues si se ocupa el tiempo en hacer demasiadas cosas, no hay tiempo para charlar, comunicarse,...
- Los puntos más conflictivos de los padres tras la separación suelen ser: los hijos, el dinero y las nuevas relaciones. Intente ser objetivo y no intentar poner al hijo de su parte. Hay que intentar solucionar estas cuestiones, sin involucrar a los hijos.
- Es preferible para los niños, que vuelva a constituirse una familia compuesta por hombre y mujer, aunque uno de ellos no sea el verdadero progenitor; ello reparará los vínculos dañados, aunque requerirá tiempo la aceptación de esa nueva situación por parte de todos.
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